El titular de la cartera de Justicia aseguró el miércoles que no había recibido ninguna petición de Celestino Córdova, quien permanece encarcelado tras ser hallado culpable por el caso Luchsinger Mackay.
Más de 80 días lleva el machi Celestino Córdova en huelga de hambre. El único condenado por el caso Luchsinger Mackay solicitó la salida de la cárcel por 48 horas para recurrir a su rehue y realizar una ceremonia propia de su cultura.
Así lo indica una carta escrita por él mismo y enviada el 13 de enero, cuando aún gobernaba Michelle Bachelet, a diferentes autoridades gubernamentales, entre ellas el Ministerio de Justicia, desmintiendo lo señalado el miércoles por el actual titular de dicha cartera, Hernán Larraín, quien sostuvo que no había recibido ninguna petición.
Larraín agregó que «no es un procedimiento razonable el que se negocie poniendo una huelga de por medio, porque es una presión indebida para cualquier autoridad».
El machi solicitó además «la absolución de todas y todos mis hermanas y hermanos procesados, perseguidos, política y judicialmente por la justa demanda del pueblo mapuche».
El lunes se supo que, producto de la huelga de hambre, el estado de salud de Celestino Córdova se había agravado y que había perdido la consciencia debido a una baja de glicemia.
Su abogado, Jorge Guzmán, aseguró que «ha bajado 21 kilos aproximadamente, está en control y monitoreo constante por el médico de cabecera. El estado de salud es bastante delicado, la baja de peso es notoria».
Preocupación de la Amcam
En un comunicado enviado este jueves a Sebastián Piñera, la Asociación de Municipalidades con Alcaldes Mapuche (Amcam) manifestó su preocupación por el «delicado estado de salud» del machi Celestino Córdova.
«La situación de nuestra autoridad ancestral está empeorando cada día, según lo manifestado por su médico tratante y familia, por lo que creemos necesario apelar a su condición de Presidente, como también a su responsabilidad ante el cumplimiento de los tratados internacionales en materia de derechos indígenas de los que Chile es signatario, para dar una solución a esta compleja situación humanitaria», señala el texto.
La Amcam defendió la solicitud de Córdova de salir por 48 horas de la cárcel para visitar su rehue, ya que en el recinto penitenciario no existen las condiciones para realizar la ceremonia.
En cuanto al juicio que se está llevando a cabo, la Amcam asegura que las pruebas no han sido concluyentes en demostrar la culpabilidad de Celestino Córdova. «Pese a su inocencia, asumió la condena propinada por el Estado Chileno como parte de la persecución política ya no es personal, sino que en contra de todo un pueblo».
