Inclusión
Muchos años antes de la promulgación de la ley Nº 21.015 de Inclusión Laboral, la Fundación Tacal se dedicaba a la capacitación y búsqueda de trabajo para adultos con alguna discapacidad. Andrea Zondek, su fundadora, conversó con El Mostrador sobre el trabajo que han hecho durante los últimos 32 años, y de cómo Chile hoy alcanzó el trabajo que ellos comenzaron en 1985.
“No basta solo con la rehabilitación. Sí, hay que rehabilitar, pero ¿para qué? Para insertarse a la sociedad, a la familia y si eres un adulto, a un trabajo”, dice Andrea Zondek, fundadora y presidenta de la Fundación Tacal. Esa es la idea principal detrás de la fundación: no quedarse solo con el trabajo de rehabilitación. Lo que comenzó como un trabajo dedicado exclusivamente para las personas con discapacidad mental y con solo 5 alumnos, hoy se ha ampliado a todo tipo de discapacidad y cuenta con más de 2.500 personas con contrato indefinido.
Luego de su paso por el servicio público como trabajadora social, Zondek vio el profundo estado depresivo en el que se encontraban los pacientes que eran exitosamente rehabilitados y dados de alta. “La rehabilitación es un derecho, Y debería terminar con un objetivo claro que es la inclusión. Si eres un niño en la escuela y en la familia, si tú eres un adulto, en la familia y en la sociedad”, agrega Zondek.
Con más de 32 años de trabajo, la Fundación Tacal buscaba inclusión cuando nadie lo hablaba. “En una época en la que la cesantía era súper alta yo buscaba inclusión laboral, todo el mundo consideraba que se me habían caído todos los tornillos (…) pero el tiempo me ha dado la razón”, comenta Zondek. Gracias a este trabajo la fundación hoy ha podido lanzar el Manual para una Inclusión Laboral Efectiva de Personas con Discapacidad, en el cuál se reúne el método de trabajo que han desarrollado y que se encuentra disponible de forma gratuita en su página web para que todos los que quieran aprender lo puedan hacer.
La metodología que han desarrollado está pensada en garantizar la independencia, ya que según Zondek, su trabajo se realiza “desde un enfoque profesional de competencias y no desde la caridad. La caridad dura un ratito pero las personas con discapacidad debe incorporarse a un trabajo porque tienen las competencias para desarrollarlo y no porque el pobrecito tiene una discapacidad”. Uno de los trabajos que realizan como fundación es el análisis de las habilidades y capacidades de sus alumnos para ejercer cierto cargo, de esta forma se puede garantizar su mantención en el trabajo.
Otra de las áreas importantes, que Zondek destaca, es que se debe trabajar en la capacitación de los compañeros. Desde Tacal han hecho un diagnóstico en dónde uno de los mayores problemas dentro de las empresas sería la sobre protección, la ayuda innecesaria de los compañeros finalmente resulta en una carga más. Para evitar esto la fundación realiza cursos para los compañeros de trabajo y los jefes, una vez realizada la capacitación, se hace un seguimiento del alumno capacitado, ya que según Zondek, “sin seguimiento las posibilidades de que sea un proceso exitoso son bajas”.
Desde que se promulgó la ley de Inclusión Laboral, Andrea Zondek, ha visto el mayor cambio de los últimos años. “Desde que la presidenta lo mandó al congreso llegaron las empresas. Cuando se promulga la ley tenemos una cantidad de empresas que están disponible para hacer inclusión y transformarse en empresas inclusivas, eso significa los cambios culturales al interior, cambios de políticas, una cosa mucho más amplia que a mí me gusta más porque es transformar la cultura de la empresa”, dice Zondek.
