Emprendedores
Luego de que el gobierno impulsara y modificara la Ley de Pago Oportuno por la Ley de Pago a 30 días, existe expectativa en el mercado en relación a cómo se implementará esta normativa y quiénes serán los reales beneficiados en el corto plazo.
Lo que nació como una ley con foco en equiparar las condiciones para todos los actores del mercado, está a punto de ser un hecho a través de la Ley de pago a 30 días. A pesar de que existe consenso con respecto a la necesidad de una política pública de esta naturaleza, la duda que ahora nace es el cómo se ejecutará la misma, sobre todo para las Pymes.
Un “cambio cultural” de estas características requiere considerar que, si no existe una mirada amplia y flexible, el remedio puede terminar siendo peor que la enfermada. Esto teniendo en cuenta que para un gran pagador siempre va a ser más beneficioso un proveedor con flexibilidad a la hora de negociar.
Para la implementación de esta nueva ley el foco debe estar puesto en buenas prácticas de pago. Fynpal, plataforma pionera en financiamiento digital, entrega algunas recomendaciones a considerar;
– Confirmar la recepción y fecha de pago de las facturas recibidas antes de 48 horas, lo anterior es una información valiosa para proyectar los flujos y facilitar la cotización de anticipos.
– Cumplir con la fecha de pago establecida y ofrecer alternativas de pago anticipado al momento de confirmar la factura, entregando la opción al proveedor de disminuir sustancialmente su costo de financiamiento y cobranza.
– Privilegiar pagos vía transferencia electrónica, versus el pago a través de cheques o vale vista, informando al cliente por mail o mensaje de texto el abono realizado.
– Simplificar el proceso de aplicación de descuentos y rebates considerando políticas que no impacten en los plazos de pago de las facturas correctamente emitidas.
