El gerente general de CorreosChile, José Luis Rodríguez, habló con Max Raide sobre los desafíos, alcances y cambios del negocio postal en plena era digital y la forma de mantener el rol social de la compañía ¿Cómo se adapta una de las primeras empresas estatales al comercio electrónico?
CorreosChile es una empresa estatal que tiene 270 años de antigüedad. La concentración de sus procesos comerciales se halla, obviamente, en los correos, teniendo más de dos mil carteros trasladando envíos en todo Chile. Pero el avance apresurado de la tecnología y la digitalización de las comunicaciones ha gatillado varios cambios en la compañía.
El gerente general de CorreosChile, José Luis Rodríguez, dice que “el cambio más grande en el contexto en que estamos metidos hoy día, es que la digitalización de las comunicaciones ha hecho que la principal fortaleza histórica que tenía Correos, que era las cartas, los documentos, donde todavía el día de hoy se mueve del orden de un millón de documentos al día, venga cayendo de forma significativa”.
“El complemento -sigue Rodríguez- sobre lo que estamos trabajando con mucha fuerza, es sobre la paquetería, que todos sabemos que todos somos usuarios, como ha venido creciendo en el último tiempo tanto la paquetería nacional como la paquetería internacional. Entonces cuando cambia de ese tamaño de esa forma el escenario, es que una empresa tiene que plantearse nuevamente cual es la tecnología que tiene que ocupar, cuales son los protocolos que tiene que ocupar, cual es la cultura que esa empresa tiene que tener”.
El gerente general de la empresa también explicó los cambios que vive la industria cuando el comercio digital tiene unas proyecciones alentadoras en el terreno económico.
“Y cuando una industria crece tanto, lo que va pasando, lo que permite ese crecimiento es la especialización de los distintos actores, en distintos segmentos de clientes o distintos segmentos de la industria. Por lo tanto nuestra principal visión es que nosotros somos una alternativa, o estamos generando una alternativa muy valiosa para los clientes, tanto el destinatario les decimos nosotros al comprador, como para el vendedor”.
Rodríguez sostiene que “el primer objetivo de CorreosChile es cumplir su rol social”. El rol social de la empresa estatal la divide en tres servicios: El primero es “la posibilidad de que cualquier persona, desde cualquier parte de Chile, pueda encargar lo que necesite desde cualquier parte del mundo a un costo razonable”.
El segundo es permitir la comunicación entre personas y entre personas y empresas. Esto, en consonancia con lo anterior, para posibilitar la comunicación de los chilenos en cualquier punto del país.
El tercero, por su parte, es apoyar al Estado en alguna de sus funciones. ”El Estado es el que tiene más necesidades muchas veces de hacer tareas que lleguen a todos los chilenos, y es por eso, por ejemplo, que nosotros cumplimos un rol muy importante de cara a la Junaeb, por ejemplo. Hacemos toda la repartición de pases escolares, o hacemos apoyos también en repartir útiles escolares, o los pc, en las campañas de entregas de computadores”, señala Rodríguez.
“El rol social va cambiando, y en el rol social nosotros tenemos que acompañar al Estado y a los chilenos en el fondo, de darles de la mejor manera posible, cumplirles o satisfacerles esas necesidades que tienen en todo momento. Hoy día, democratizar el comercio es una necesidad, es un tremendo beneficio para todos los chilenos, y no solamente para el comprador sino que para la regionalización”.
“Correos ha tomado un rol muy importante, porque tú puedes generar trabajo en localidades rurales, porque cualquier cosa que tu produzcas en cualquier parte de Chile, tu ahora puedes venderla en cualquier parte del país pero también hacia afuera”, indicó el gerente general de CorreosChile”.
