Su advertencia se justifica por el aumento de la popularidad de estos dispositivos en el mundo, que ya cuentan con 367 millones de usuarios, frente a 1.100 millones de fumadores de cigarrillos convencionales.
¿Puerta de entrada a nuevas adicciones?
La popularidad de los cigarrillos electrónicos –que permiten la inhalación de líquidos con nicotina y saborizantes– ha puesto en alerta a los legisladores de todo el mundo, que temen sea una puerta de entrada a nuevas adicciones para los jóvenes.
Estos dispositivos exponen al consumidor a una menor cantidad de toxinas que el cigarrillo combustible, pero representan de todos modos «riesgos para la salud», sostiene el informe, que evalúa los resultados de las medidas (MPOWER) preconizadas por el Convenio Marco de la OMS para el Control del Tabaco (CMCT).
«Aunque los niveles específicos de riesgo asociados a los SEAN (sistemas electrónicos de administración de nicotina) no han sido estimados de forma concluyente, los SEAN son indudablemente dañinos y deberían por lo tanto estar sujetos a regulación», indica la OMS en su último reporte sobre la epidemia global de tabaco.
«Contienen aerosol y nicotina. Y ese aerosol contiene metales, diacetil (saborizante). Se sabe que estos elementos son dañinos para el corazón, para los pulmones, y se está investigando cuáles son los efectos a largo plazo, si pueden incluso causar cáncer, aunque esto no está muy bien establecido», dijo a la AFP Vinayak M. Prasad, jefe del programa Iniciativa Liberarse del Tabaco (FTI en inglés) de la OMS.
«Los jóvenes no deberían usarlos porque perjudica el desarrollo del cerebro», añadió tras la presentación del informe en el modernista Museo do Amanhã (Museo del Futuro).