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En medio de esta demanda explosiva por computadores, principalmente notebooks, la crisis global de semiconductores y chips de silicio que hacen funcionar los computadores y también muchos otros dispositivos electrónicos se han visto afectados.
La industria de los computadores personales se ha visto afectada por la escasez de componentes para la fabricación de semiconductores o chips, esto debido al aumento en la demanda motivado por los cambios de hábito que propició la pandemia.
Chile no queda afuera de este problema originado principalmente por la pandemia de Coronavirus y también el boom de ventas de notebooks para el teletrabajo y educación a distancia. Esta ausencia de productos de tecnología como notebooks, que en periodos pre-pandemia mantenían existencias con varios modelos disponibles en las tiendas, ha cambiado ya que hoy los computadores personales duran muy poco tiempo en las vitrinas tanto físicas como venta online y a precios mucho más altos.
El Coronavirus ha afectado no sólo la salud de la población chilena, sino que también el mundo de la tecnología es otro de los principales afectados, y se estima que será así por al menos unos dos años más antes de que la situación vuelva a normalizarse.
Hoy es una realidad la falta de stock y la variedad de modelos disponibles de cada marca de computadores. Antes del Covid-19 uno podía encontrar al menos 15 o más modelos de notebooks por marca, hoy ese número se ha reducido tan drásticamente que, si se encuentra disponibilidad de una laptop, muchas veces no es el producto que se quiere, teniendo que elegir por un número reducido de configuraciones.
En medio de esta demanda explosiva por computadores, principalmente notebooks, la crisis global de semiconductores y chips de silicio que hacen funcionar los computadores y también muchos otros dispositivos electrónicos se han visto afectados debido a que algunas de las empresas que fabrican estos chips simples, de bajo costo basados en tecnologías más antiguas, no pueden seguir el ritmo de la creciente demanda, por lo que han generado escasez y los precios de estos chips se han disparado.
Además si añadimos las dificultades del transporte marítimo y aéreo, el aumento de los tiempos de tránsito y el fuerte alza en los costos de transporte es otro factor que ayuda a explicar la disponibilidad de computadores personales. Esta situación no fue prevista por los principales fabricantes de tecnología que, por el contrario, proyectaron menores ventas de sus productos pensando en que las familias gastarían menos dinero en tecnología y más en productos de primera necesidad.
Industrias como la de automóviles también se han visto afectadas, reportando más de 60.000MM de dólares en pérdidas para este 2021. Otras empresas como Apple, Sony y Microsoft han tenido que disminuir su producción, retrasando lanzamientos y reduciendo la disponibilidad de sus productos.
Por otro lado, la guerra comercial que mantiene los dos gigantes de la industria Estados Unidos y China por la carrera tecnológica hace ver otro foco peligroso. Según datos del fabricante de procesadores Intel, el 80% la producción mundial de semiconductores se concentran en 3 países: Taiwán, Corea y China. Esto denota lo grave que es que unas pocas compañías compartan el oligopolio de estas tecnologías.
Debido a esta alta demanda y que se mantendrá en el mediano plazo, no se vislumbra una pronta solución a la escasez de computadores.
