Salud
Las temperaturas a lo largo del país han marcado altos registros, que ascienden sobre los 30 grados. Y aunque hay diferentes alternativas para capear el calor, es necesario tener en cuenta algunas medidas para protegerse y evitar sufrir un golpe de calor.
Se acerca el verano y las temperaturas comienzan a aumentar. Pero la intensa presencia de radiación UV puede producir en nuestro organismo síntomas como fatiga, dolor de cabeza, mareos, falta de apetito, insomnio, calambres o en casos extremos, lesiones en la piel como melanomas e incluso cáncer.
Por esto es importante cuidarse de la exposición directa al sol y sus rayos invisibles al ojo humano.
Según la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), la evolución del clima en nuestro país muestra un aumento de frecuencia, intensidad y duración de las olas de calor. En ese contexto, Miguel Angel Marchesse, subdirector médico del Hospital Clínico de Mutual de Seguridad realiza el llamado de ser cautelosos a la hora de exponerse al sol durante los próximos meses.
Pese a lo incómoda que puede ser su aplicación, las cremas, bloqueadores y productos para la piel son necesarios para evitar daños asociados a los rayos UV. Estos son acumulativos y pueden generar un deterioro irreversible en la piel.
Por ello, se recomienda usar protector solar de un factor 30 en adelante, sobre todo en las partes que se exponen en forma directa al sol como el rostro, cuello, orejas y extremidades.
Es precisamente el agua lo que más beneficia al cuerpo estos días de calor. La hidratación es vital para el organismo, ya que beber agua regula la temperatura corporal, cuida la piel y contribuye a la capacidad del pensamiento, concentración y sentido de alerta.
Así, es recomendable mantener un consumo de agua de forma constante e hidratarte bien los días de calor. La idea es tomar líquido sin esperar a tener sed, salvo si hay contraindicación médica.
Es preferible evitar las bebidas alcohólicas, café, té o cola y las muy azucaradas, ya que pueden deshidratar el cuerpo.
Si vas a estar expuesto a altas temperaturas durante el día, es recomendable utilizar ropa más liviana y si es posible, usar sombreros o jockeys, además de calzado ligero. Es importante tener en cuenta que los materiales sintéticos, gruesos o de colores oscuros, actuarán como un imán de las altas temperaturas.
Existen horarios donde los rayos UV aumentan su potencia?.Entre las 10:00 y las 16:00 hrs es el rango de horas de mayor exposición solar, siendo precisamente el mediodía la hora peak. Por ello se debe evitar salir durante ese lapso, de lo contrario, siempre utilizar protección solar, ropa cómoda, hidratarse bien y, en medida de lo posible, transitar por la sombra.
Es muy importante evitar la actividad física en el exterior en las horas más calurosas. Para esto, es recomendable hacer deporte a primera hora de la mañana o al final de la tarde, a eso de las 19:00 horas.
Se sugiere privilegiar platos livianos en épocas de calor, así también el consumo de frutas y verduras, ya que ayudarán a mantener los niveles de hidratación y minerales que el cuerpo necesita, y a reponer las sales perdidas por el sudor.
No es solo la piel quien sufre con el sol, los ojos también son sensibles a la alta exposición de rayos UV. Con el pasar del tiempo la radiación UV puede producir daños irreparables en la córnea y retina. Por eso, es aconsejable utilizar siempre lentes de sol con filtro UV certificados.
Para tener la casa u oficina más fresca, siempre es bueno bajar las persianas para evitar que el sol entre directamente. Asimismo, no es bueno abrir las ventanas cuando la temperatura exterior es más alta. A partir de los 35ºC en el interior de la vivienda, un ventilador solo mueve el aire, no lo enfría.
El golpe de calor es un trastorno ocasionado por el exceso de calor en el cuerpo, generalmente como consecuencia de la exposición prolongada a altas temperaturas o del esfuerzo físico en altas temperaturas.
Según Leonardo Ristori, jefe de Urgencias de Clínica Indisa, “la exposición excesiva al calor ambiental o la práctica de esfuerzo físico bajo el sol pueden provocar que la temperatura corporal supere los 40° sin que el organismo sea capaz de restablecer su temperatura habitual”.
Algunos de los síntomas corresponden a la ausencia de sudor, dolor de cabeza, sed intensa o respiración rápida. En los casos más graves, hay alteraciones de conciencia de intensidad variable.
Si hay sospechas que alguien sufre de un golpe de calor, se debe de inmediato refrescar con agua fría: mojar a la persona con agua fresca usando una esponja o paño, abanicándola mientras se rocía y colocándole compresas frías en el cuello, las axilas y la ingle.
Se debe recostar a la sombra y en una zona con buena ventilación, y quitar o aflojar la ropa excesiva
Si hay síntomas más graves como pérdida de conciencia o vómitos, hay que dirigirse de inmediato a un centro asistencial más cercano.
