Inclusión
Exponen que la normativa evidenciará la relación entre consolidar organizaciones más abiertas y alcanzar una sostenibilidad de largo plazo, según revelan estudios internacionales. Además, las empresas con más de 100 personas deberán contar con un profesional certificado del área de recursos humanos que cumpla con la función de gestor certificado en la materia.
Especialistas proyectan que la implementación de modificaciones a ley 21.275 de inclusión laboral, que entrará en vigencia el próximo primero de noviembre, tendrá un positivo impacto en la competitividad de las empresas.
Entre sus exigencias más relevantes, la normativa obliga a empresas con dotaciones de más de 100 personas a contar con al menos una persona del área de recursos humanos que cumpla la función de “gestor o gestora de inclusión laboral”. Este profesional, cuya responsabilidad será desarrollar instancias que promueva.
Desde Hcmfront, proveedores de solución integral para la Gestión de Personas, explicaron que la evidencia internacional es sólida en relacionar organizaciones más abiertas con mejores perspectivas de alcanzar un desarrollo sostenible de triple impacto en el largo plazo: social, financiero y medioambiental.
Nicolás Hanckes, cofundador y gerente de Desarrollo de la firma especializada, dijo que tener una fuerza laboral diversa contribuye a una mayor experiencia, crear redes amplias y fomentar una cultura organizacional inclusiva y abierta, aunque el proceso de adopción de iniciativas que incentiven avances es aún menos ágil de lo esperado.
“Las organizaciones consideran cada vez más la diversidad y la inclusión laboral como una fuente de ventaja competitiva, además de un factor clave para el crecimiento. Pese a esto, el progreso en las iniciativas de diversificación continúa siendo lento, ya que muchas compañías no conocen sus beneficios, ni cómo utilizarlas de manera correcta para respaldar sus objetivos de crecimiento y creación de valor”.
Este cambio incluirá la modificación en el Código del Trabajo con el fin de generar una inclusión laboral de trabajadores con discapacidad. Su objetivo es proteger la inclusión de personas en situación de discapacidad en el mercado del trabajo.
Un estudio realizado recientemente por la consultora estratégica McKinsey expone la relación directa entre diversidad en liderazgos y rendimientos financieros superiores.
De acuerdo al reporte, las empresas del cuartel superior en diversidad de género de sus equipos ejecutivos tienen un 15% más de probabilidades de experimentar una rentabilidad por encima del promedio respecto a organizaciones del último cuartil.
Hanckes agregó que la entrada en vigencia de una regulación en este ámbito podría constituir un incentivo a que el mercado local acelere procesos de transformación organizacional que favorezcan culturas más inclusivas y diversas en múltiples niveles.
Sus mayores impactos, añadió, se dan en avanzar en una mirada de triple impacto, más allá del rendimiento financiero, sino también social y medioambiental.
En su análisis, la incorporación de herramientas de tecnología puede ser un factor relevante como un apoyo para diseñar estrategias de cambio más efectivas.
