Estos cambios ocurren durante el proceso de cortejo, provocando que esta “nueva modulación” sea más atractiva para la otra persona.
Aunque algunos tienen un talento natural para hacerse los indiferentes y disimular cuando se sienten atraídos por alguien, la ciencia ha descubierto que en la práctica hay cambios que evidencian esta emoción y que serían imposibles de ocultas. Según indicó la Universidad del Reino Unido, cuando nos gusta una persona corren cambios sutiles en nuestra voz que se manifiestan a través de nuestra modulación.
Estos cambios ocurren durante el proceso de cortejo, provocando que esta “nueva modulación” sea más atractiva para la otra persona, según publicó la revista Muy Interesante.
Tras analizar a 110 individuos heterosexuales, para comparar las conversaciones entre hombres y mujeres que les resultan atractivos, se detectó que “cuando los hombres hablaban con mujeres a las que encontraban atractivas, la voz se volvía más ‘cantarina’ y más variable, mientras que cuando hablaban con mujeres que no les gustaban la voz se volvía más baja y grave”, señalaron.
Y es que según aclaró el especialista que lideró la investigación, Juan David Leongómez, si bien la masculinidad es importante para los hombres, la utilización extrema de esta en los tonos de voz grave, se asocia a rasgos negativos.
“Esto pone a los hombres en un dilema, porque tienen que transmitir dos mensajes aparentemente contradictorios al mismo tiempo. La solución puede ser la de variar su tono de voz, lo que explicaría la calidad ‘cantarina’ de las voces que hemos observado en los hombres cuando hablan con mujeres atractivas”, afirmó el investigador.
