Sustentabilidad
El ejecutivo destacó los resultados del Informe de Sustentabilidad 2015 que elabora la firma controlada por el grupo Luksic hace poco más de una década. Su meta es alcanzar tres objetivos clave de la «Visión Medioambiental 2020» que se fijó la compañía para avanzar en reducir los gases de efecto invernadero, elevar la valorización de los residuos industriales sólidos y reducir el uso de recursos hídricos en el desarrollo de sus procesos.
La Compañía de Cervecerías Unidas (CCU) publicó recientemente su Informe de Sustentabilidad 2015, un documento que la empresa controlada por el Grupo Luksic emite hace más de una década y que es parte de la impronta que ha dejado su gerente general, Patricio Jottar, en los más de 17 años que lleva al frente de la firma.
«Este informe es una herramienta que muestra nuestro continuo compromiso con los 10 Principios del Pacto Global de las Naciones Unidas», señala el propio ejecutivo en una carta al inicio del documento, donde enumera una serie de hitos alcanzados el año pasado en materia de trabajo con la comunidad, multinacionalización de la compañía, buenos resultados económicos y medidas ambientalesque, según indica, se ajustan al acuerdo de la ONU que pide a las empresas de todo el mundo adoptar, apoyar y promulgar, dentro de su esfera de influencia, un conjunto de valores fundamentales en las áreas de derechos humanos, normas laborales, medio ambiente y anti-corrupción.
Para Jottar, quien es ingeniero comercial de la Universidad Católica, el tema de la sustentabilidad constituye uno los pilares de su gestión en CCU. Por eso hace hincapié en el trabajo que se viene desarrollando sobre la base de la «Visión Medioambiental 2020» que diseñó la firma con énfasis en tres «objetivos clave» que buscan, primero, reducir en 20% la generación de gases de efecto invernadero por hectolitro (100 litros) producido; en segundo lugar, elevar la valorización de los residuos industriales sólidos en 100%; y en tercer término, disminuir el consumo del recurso hídrico en 33% por cada hectolitro.
En esa línea, los resultados conseguidos el año pasado le permitieron sacar cuentas alegres. «Los datos registrados al 2015 reflejan un avance de 72,1% respecto al objetivo clave número uno, un 59% respecto al objetivo clave dos y un avance de 82,1% respecto de la meta del objetivo número tres», dijo.
Asimismo, Jottar resaltó que los avances conseguidos entre 2010 y 2015 «nos dan la seguridad de que estamos avanzando por el camino correcto para cumplir las metas planificadas» y que no persiguen otra cosa que convertir la compañía en un “referente medio ambiental”.
«Lo realizado en 2015 nos debe enorgullecer como compañía. Celebramos importantes logros en la consecución de nuestros objetivos comerciales, de relación con la comunidad y medio ambientales, gracias a la implementación de actividades que nos permitieron mejorar los resultados, fortalecer nuestras posiciones de mercado y hacer más eficiente nuestra operación», expresó.
Jottar también está a la cabeza del Comité Pro Reciclaje del Empresario, una instancia gremial que se creó frente al proyecto de ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP) y que obliga a empresas productoras (fabricantes e importadoras) de productos prioritarios a hacerse cargo de sus productos una vez terminada su vida útil. Se trata de una instancia que conforman 15 asociaciones gremiales y que cuenta con el apoyo de la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa).
La normativa especifica como productos prioritarios los aceites lubricantes, aparatos eléctricos y electrónicos (incluidas lámparas o ampolletas), diarios, periódicos y revistas; envases y embalajes, medicamentos, neumáticos, pilas y baterías, plaguicidas caducados y vehículos.
«La iniciativa legal plantea una nueva forma de desarrollar los negocios para la industria en general. Es por ello que la compañía ha realizado cambios internos que favorecerán sus operaciones al momento que se ponga en marcha esta ley», sostiene CCU.
