Salud
Prevención, tratamiento y derivación es la lema de la nueva estrategia para la atención de la salud mental en la comuna de La Florida. Bajo esa premisa, los Centros de Salud Familiar (Cesfam) están adoptando un método de atención integral para los usuarios con el objetivo de prevenir suicidios u otras patologías derivadas de problemas de salud mental.
Una tarea diaria que promete un trabajo integral, mediante las tres lineas de acción, es la apuesta de la comuna de La Florida para prevenir las patologías asociadas. Nicole Saint-Jean, asesora técnica en salud mental de la Corporación Municipal, señala al respecto que “cuando hablamos de prevención hacemos los esfuerzos por mantener a nuestra población sana a través de intervenciones de carácter preventivo enfocado principalmente en los primeros años de vida”, asegura Saint-Jean, quien agrega que “el tratamiento y rehabilitación se focaliza en restablecer la salud a través de tratamientos psicoterapéuticos individuales, grupales o tratamiento farmacológico cuando se requiera».
Y es que el suicidio en adolescentes y jóvenes en América Latina, se sitúa como la tercera causa de muerte en este segmento, tras los homicidios y los accidentes de tránsito, por eso su tratamiento oportuno y apropiado puede generar una gran diferencia. “La derivación se realiza cuando el caso, por su grado de complejidad, supera las acciones que nuestro nivel puede realizar y se deriva a una especialidad mayor”, comenta la profesional.
El alcalde de la Municipalidad de La Florida, Rodolfo Carter, explicó que los nueve Cesfam de la comuna, ofrecen la más variada oferta de atención. «Parte de nuestro trabajo en los centros de salud, consiste en orientar y fortalecer la prevención, promoción, tratamiento y rehabilitación de patologías y es lo que seguiremos haciendo con todas nuestras fuerzas”, agregó Carter.
Según un documento de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), algunas de las estrategias para la prevención del suicidio, son hacer un seguimiento a personas que intentaron suicidarse y prestarles apoyo; restringir el acceso a los medios de suicidio más comunes; sensibilizar a jóvenes, padres, docentes y trabajadores de la salud.
Asimismo, se pueden realizar intervenciones específicas a grupos que a veces de manera injusta sufren discriminaciones, como los jóvenes indígenas y LGTB; identificar y tratar los trastornos mentales y el uso de sustancias; difundir responsablemente información en los medios y redes sociales; capacitar para la prevención del suicidio a personal de salud y de educación; y mejorar el registro y los análisis de los suicidios.
De acuerdo al mismo documento de la OPS, las señales de alerta ante un posible suicidio, son el aislamiento; los intentos previos de suicidio; los antecedentes familiares; la irritabilidad; la depresión o la ansiedad; sentirse atrapado o una carga; atravesar eventos estresantes; el aumento del uso de sustancias; la pérdida del interés y las enfermedades crónicas.
