
Luz azul de pantallas: riesgos para la piel y cómo protegerla del envejecimiento prematuro
La exposición prolongada a la luz azul de dispositivos electrónicos puede afectar la piel, acelerando el envejecimiento prematuro y favoreciendo la hiperpigmentación. Expertos recomiendan usar protectores solares con filtros específicos y adoptar hábitos saludables para protegerla.
En un mundo totalmente digitalizado e hiperconectado, las personas pasan largas horas frente a la pantalla de de celulares, computadores y tablets. Este uso excesivo y prolongado ha despertado ciertas inquietudes sobre los posibles efectos de la luz azul en la piel y su relación con el envejecimiento prematuro y la hiperpigmentación.
Esta luz azul, emitida por los dispositivos electrónicos también puede tener un impacto significativo e importante en la salud de la piel.
Este tipo de luz, es un tipo de luz visible dentro del espectro electromagnético y es conocida como luz visible de alta energía (HEV por sus siglas en inglés), puede penetrar profundamente en las capas de la piel, descomponiendo el colágeno y elastina, lo que contribuye al desarrollo de arrugas.
Katherine Barría Steinfort, dermatóloga estética , y directora médica de la Clínica Dermatológica KB, explica que la luz azul es una parte del espectro de la luz visible con una longitud de onda de aproximadamente entre 420 y 490 nm.
Estudios han demostrado que la luz visible puede penetrar la dermis y afectar la epidermis, causando daño oxidativo en la piel. La especialista explica que “las pantallas no tienen el mismo grado de radiación que la luz solar. La luz visible natural atraviesa las ventanas, por ello se recomienda el uso de fotoprotector todo el año, incluso en interiores”.
¿Cuáles son los efectos de la exposición prolongada?
Uno de los principales efectos de la luz azul en el organismo tiene relación con el ciclo de sueño y vigilia. Barria advierte que la exposición ocular prolongada a pantallas inhibe la liberación de melatonina, la hormona clave para conciliar el sueño. “El envejecimiento extrínseco está relacionado con la calidad del sueño. Si este se altera, puede aumentar el estrés oxidativo y acelerar el envejecimiento de la piel”, explica la especialista.
Además, la exposición prolongada a la luz azul puede generar un aumento del estrés oxidativo en la piel, lo que puede provocar la oxidación de melanina y hemoglobina, favoreciendo la hiperpigmentación.
Una de las dudas más frecuentes es si es necesario usar protector solar en la noche cuando se trabaja frente a un computador. La especialista explica que no es necesario. “Lo más importante en estos casos es la protección antioxidante y respetar los ciclos de sueño-vigilia. La alteración del sueño es lo que más envejece en relación con el uso de pantallas nocturnas”, agrega.
¿Cómo proteger la piel de la luz azul?
Los protectores solares tradicionales no siempre protegen contra la luz azul, por lo que la dermatóloga recomienda el uso de fotoprotectores que contengan filtros contra la luz visible y antioxidantes que ayuden a contrarrestar el estrés oxidativo. “Si el protector solar tiene color y contiene óxido de hierro, será más efectivo para prevenir manchas”, explica.
Para una mejor protección, sugiere, “aplicar protector solar tres veces al día y dejarlo a la vista, como en el escritorio o al lado del computador, para recordar su aplicación”.
Consejos para quienes trabajan muchas horas frente a pantallas
- Fotoprotección adecuada: Uso de protectores solares con filtros específicos para la luz visible y antioxidantes.
- Antioxidantes tópicos y orales: Aplicar vitamina C y niacinamida en la piel, además de consumir antioxidantes como superóxido dismutasa y astaxantina.
- Cuidar los hábitos de sueño: Evitar trabajar con pantallas en la cama y respetar el ciclo de sueño-vigilia.
- Regular el brillo de las pantallas: Reducir la intensidad de la luz y hacer pausas durante la jornada laboral.
Cuidar la piel frente a la exposición a la luz azul no solo implica el uso de protector solar, sino también la adopción de hábitos saludables que protejan la piel y favorezcan un descanso adecuado. Un enfoque integral es clave para mantener una piel sana en la era digital.