El vicepresidente ejecutivo de Corfo, Hernán Cheyre, se reunió con la Asociación Gremial de Pescadores Artesanales de Tongoy, las empresas privadas y los parlamentarios de la zona, a fin de imponerse de los efectos negativos que ocasionó en los cultivos de ostiones de la Región de Coquimbo el tsunami que asoló las costas de Japón el pasado 11 de marzo.
Durante el encuentro, el directivo manifestó su preocupación por los problemas que enfrenta la comunidad local, y junto con comprometer el apoyo de Corfo destacó que aunque «superficialmente no sé ve tanto, el daño es mucho más profundo».
Después de recorrer los cultivos dañados y ver en terreno la tragedia que afecta a los pescadores y empresas de la zona, Cheyre anunció una serie de medidas que tomará esta institución, las que se unen al trabajo coordinado que los servicios públicos de la Región encabezados por el Intendente Sergio Gahona están realizando hace una semana.
Para el directivo, la primera medida es fortalecer un programa de garantías para los créditos que pidan los empresarios y así puedan sacar adelante sus proyecto.
«Son créditos que ellos van a pedir al sistema financiero y Corfo va a garantizar un porcentaje muy importante, para eso desde la próxima semana las instituciones financieras bancarias y no bancarias se van a desplazar hasta Tongoy acompañados de los ejecutivos de Corfo. Lo segundo, vamos a poner adelante un Programa de Emprendimiento Local para que a lo menos tenga 20 beneficiados en los próximos días lo que significa a lo menos empleo durante siete meses. Tercero, queremos apoyar alianzas entre empresas más grandes y proveedores para que puedan potenciarse entre sí y juntos puedan sacar productos mejores», declaró.
En la inspección a la zona se pudo determinar que el mayor daño estaría en las líneas de cultivo, las que se cayeron al fondo marino, donde los ostiones no pueden vivir, y en las semillas de reposición, lo que podría afectar no sólo la producción actual, sino que además pone en peligro las temporadas 2012-2013.
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