El ministro de Hacienda, Felipe Larraín, explicó este miércoles a un grupo de adultos del mayores del centro comunitario «Carol Urzúa» en la comuna de Santiago, los beneficios del proyecto de ley que elimina o reduce del 7% de salud para los jubilados, el cual tendrá un costo fiscal del orden de U$120 millones en 2014 y que se incrementará a US$190 millones en 2020.
El jefe de finanzas públicas dijo que este proyecto «era un anhelo por mucho tiempo de los adultos mayores de Chile y estamos muy contentos de poder hacerlo e implementarlo cumpliendo con lo que prometimos».
El secretario de Estado resaltó que la iniciativa legal tiene como objetivo ayudar al 60% más vulnerable de las personas jubiladas.
El proyecto contempla que el primer grupo de beneficiados sean los pertenecientes al primer quintil de ingresos, es decir, a adultos mayores que tienen un ingreso per cápita de $31.582. De ser aprobada con rapidez la iniciativa legal, comenzaría para ellos en octubre de este año, llegando a cero en octubre de 2012.
Luego, se beneficiaría al segundo quintil, que corresponde a jubilados con un ingreso per cápita de $79.733. Para ellos, la reducción gradual comenzaría en octubre de 2012 y llegaría a cero en octubre de 2013.
«En octubre del 2013 el 40% más pobres de nuestros pensionados quedan el 0% de cotización para salud y el 20% que le sigue va a reducir su cotización de 7% a 5%. Este es un proyecto que al año 2014 va a tener un universo de nuevos beneficiarios de casi 800 mil personas», aseveró el ministro.
El ministro recalcó además que la eliminación del 7% en salud «no hace diferencia entre Isapres y Fonasa, siendo importante estar dentro del 60% más vulnerable de la población. Las personas tendrán los mismos derechos en salud, no hay ninguna diferencia con la actualidad».
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