A 10 años y un día de presidio fue condenado un sujeto llevado a juicio oral por el Ministerio Público como autor del delito de violación reiterada cometido en contra de su hija.
Las pruebas presentadas por la fiscalía fueron suficientes para acreditar ante los jueces orales de Talca, que el hombre sucesivamente aprovechó los momentos en los que se quedaba a solas con la menor para atacarla.
«Lo más destacable es que en un caso de violación se le cree a la víctima que acusaba a su propio padre en una denuncia que se refería a hechos que terminaron de ocurrir el año 2006», destacó el fiscal José Luis González.
Junto con destacar la envergadura de la pena, 10 años y un día sin ningún tipo de beneficios, el persecutor destacó que las pruebas aportadas fueron suficientes para acreditar ante el tribunal que este imputado -con irreprochable conducta anterior-, era responsable de los hechos por los cuales fue acusado y así desvirtuar la teoría de la defensa, que alegó total inocencia.
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