El Municipio de Santiago interpuso una querella por el delito de robo en lugar no habilitado y daños a la propiedad pública ante el Séptimo Juzgado de Garantía de dicha comuna, contra quienes resulten responsables de la sustracción de un valioso equipamiento tecnológico de la Escuela Salvador Sanfuentes.
El material pedagógico sustraído fue avaluado en un monto de $10 millones, correspondientes a cinco notebooks, proyectores, una pantalla interactiva, reproductores de DVD, cámaras fotográficas, equipos de audio, entre muchos otros implementos. Mientras, el daño que sufrió la escuela en infraestructura y mobiliario asciende a $2 millones.
El delito fue constatado en una visita realizada por un equipo municipal a la Escuela Salvador Sanfuentes, la que tras el terremoto comparte instalaciones con el liceo en toma Isaura Dinator de Guzmán, percatándose de esta forma de la pérdida de estos elementos educativos.
El alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett, manifestó que «la justicia investigue este injustificado delito y dé con sus responsables, y que además se cite a declarar a las cuatro alumnas responsables de la toma del recinto para sancionar a quienes cometieron este hecho delictual».
El jefe municipal también advirtió a los alumnos en paro que mantienen los liceos tomados, que «en caso de tener antecedentes de robo o hurto dentro de los establecimientos, llegaremos hasta las últimas instancias legales para dar con los culpables, ya sean alumnos o personas externas a los colegios».
Pidió además a los estudiantes cuidar la infraestructura y material pedagógico de los establecimientos.
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