La Corporación Chilena de la Madera (Corma) manifestó su preocupación por los incendios forestales que afectan al país e hizo un llamado a las autoridades a llevar adelante, de una vez, la modernización de la legislación en esta materia, la que a juicio del organismo adolece de considerables debilidades.
De esta forma Corma se refiere al siniestro registrado en la Región del Biobío, cuyo balance sobrepasa las 10 mil hectáreas dañadas, más de 30 casas quemadas, 500 personas evacuadas en la zona y el fallecimiento de una persona, de acuerdo a Onemi, así como del siniestro que lleva afectadas más de 12 mil hectáreas de alto valor paisajístico y ambiental en las Torres del Paine.
«Vemos con profunda preocupación que todos los años, a pesar de las campañas de prevención realizadas por los sectores público y privado, se producen incendios causando gran daño a las personas, a instalaciones industriales y al medioambiente, incluso en este caso con la pérdida de vidas humanas», afirmó el presidente de Corma, Fernando Raga.
El ejecutivo indicó que el incendio registrado en la Octava Región destruyó la planta de Paneles Arauco, lo que impacta también en la fuente laboral directa de cerca de mil 300 personas de la región.
Frente a ello Raga planteó que «los inicios de un incendio forestal son conocidos y responden en la gran mayoría de los casos a la intención o negligencia de las personas, pero causan daños al país entero, por eso hemos planteado reiteradamente la necesidad de modernizar la normativa referida a ellos, ya que la actual tiene múltiples debilidades».
Asimismo agregó que «Corma se ha involucrado en esta materia durante los distintos gobiernos para buscar perfeccionar la actual regulación relativa a los incendios forestales. Las autoridades actuales han avanzado en un nuevo proyecto de ley, el que pedimos que se evacue a la brevedad a tramitación parlamentaria, ya que la actual normativa está repartida en muchos cuerpos legales, sin la debida conexión».
El presidente de Corma explicó que cada año, las pérdidas relacionadas con los incendios forestales totalizan alrededor de US$ 60 millones, ello sin considerar el daño irreparable al medio ambiente, a la flora, fauna y a la actividad productiva agrícola, ganadera, forestal y turística, como ha ocurrido particularmente con el incendio que afecta a las Torres del Paine.
Asimismo, Fernando Raga manifestó su rechazo a los actos de violencia que atentan contra los elementos que permiten combatir el fuego, como fue la quema de un helicóptero de una empresa de servicios, el pasado viernes, el que disminuye la capacidad de reacción frente a los siniestros, tanto de las empresas forestales como de otros propietarios y de la comunidad.
«El Estado y las empresas han hecho un gran esfuerzo por invertir en infraestructura y en recurso humano para prevenir y combatir los incendios, y este tipo de actos es repudiable, pues dañan a toda la comunidad al impedir proteger la producción, el empleo, el medio ambiente e incluso las vidas humanas», dijo.
Igualmente reiteró el llamado a las autoridades a que se aplique el máximo rigor de la ley contra los que resulten responsables de causar los incendios forestales, así como a quienes hayan efectuado el atentado contra el helicóptero de combate de incendios.
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