El fiscal de la Zona Metropolitana Centro Norte, Ernesto Vásquez, junto a funcionarios de la PDI, se reunió este martes con el alcaide de la Cárcel de Alta Seguridad (CAS), Juan Carlos Rojas, para tratar distintos aspectos relacionados con el funcionamiento del recinto y respecto de la visión que la autoridad del penal tenía sobre la muerte del interno Carlos Deformes, ocurrida allí el domingo pasado.
En la ocasión además se realizó un recorrido en el que se reconstruyó el trayecto desde la celda que ocupaba el interno Deformes, hasta el lugar donde se produjo finalmente su muerte, en la zona de enfermería del penal, aspecto que deberá detallar el informe que prepara la Brigada de Homicidios de la PDI a requerimiento de la Fiscalía.
El fiscal Vásquez calificó positivamente la visita, puesto que se indagó acerca del régimen interno que tenía Deformes y de las distintas funciones que realiza personal de Gendarmería, sobre todo en una unidad especializada como es la CAS.
Consultado acerca del control directo que debía tener Gendarmería con el imputado, el fiscal sostuvo que efectivamente las autoridades del recinto penitenciario informaron que existe un control directo con las personas que están privadas de libertad en dicho sector, pero que para determinar si se cumplió dicha acción, es necesario esperar el resultado del sumario interno que realiza Gendarmería.
Además, Vásquez agregó que la fiscalía indaga «acerca de las circunstancias en cómo se produjo el hecho que una persona sujeta a la máxima vigilancia habría optado por la muerte en forma autónoma, o si habría una tercera persona involucrada en el mismo, situación que, hasta este momento, estaría descartada. Sin embargo, el estándar de investigación penal, para despejar toda duda al efecto, es el que se ha de aplicar a este caso».
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