El presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, Jorge Tarud, calificó este lunes de «muy graves» las palabras de Rosa María Payá, hija del disidente cubano Oswaldo Payá, en cuanto a que la muerte de su padre habría sido intencional, y además realizó un llamado al Gobierno para que instruya al embajador en La Habana que indague acerca de estas declaraciones.
«La defensa de los derechos humanos y de sus dirigentes no es una intromisión en los asuntos internos de Cuba y el mundo de los derechos humanos está conmocionado con la muerte de este líder que luchó por la democracia en su país», afirmó Tarud.
Payá, de 60 años, encabezaba el Movimiento Cristiano Liberación y desde hace más de una década impulsaba el «Proyecto Varela», iniciativa que busca promover una transición democrática en la isla.
El disidente perdió la vida el domingo en un accidente de tránsito en el que viajaba junto a otras tres personas cuando el vehículo se estrelló contra un árbol cerca de la ciudad de Bayamo, a unos 744 kilómetros al este de La Habana.
En el accidente también pereció el cubano Harold Cepero y resultaron lesionados el español Ángel Carromero y el sueco Jens Aron Modig.
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