El presidente (s) de la DC, diputado Fuad Chahín, manifestó este miércoles que el resultado de la encuesta de Adimark respecto de la Evaluación Gestión del Gobierno Enero 2014, demostró que el nivel de aprobación alcanzado por el Presidente Sebastián Piñera, aún no logra superar el 50%, fracasando a su juicio, en su intento de posicionarse como futura figura para una próxima campaña a la primera magistratura del país.
La aprobación de Piñera aumentó en 4 puntos en enero de 2014, situándose en 49%, transformándose en la quinta alza consecutiva y el mejor resultado desde fines de 2010, por su parte la «Nueva Mayoría» es la única coalición política que aumenta su nivel de aprobación en 4 puntos y llega al 36%.
«Después de la segunda vuelta vimos a un Presidente de la República desatado en su rol de campaña mientras su coalición política se desintegraba, tiene un alza que no todavía no alcanza a una aprobación del 50%, esto demuestra que no le va a alcanzar a este presidente, que ha utilizado los últimos meses de su gobierno pensando en una futura campaña, en vez de cerrar como corresponde su gestión presidencial», afirmó el dirigente DC.
Chahín, consultado por los datos que entregó la encuesta respecto de la Nueva Mayoría, sostuvo que «nos parece una buena noticia que la Nueva Mayoría, ya sea un pacto político programático que se ha identificado con la ciudadanía y que ha crecido en su valoración, teniendo un aumento en su aprobación».
Agregó que «esto demuestra que hubo una buena recepción del gabinete de ministros anunciado por la Presidenta de la república, el desafío es como se va consolidando la Nueva Mayoría y como también vamos manteniendo el apoyo a Michelle Bachelet».
En tanto, respecto de la evaluación obtenida por el parlamento que muestra un leve aumento con un 19% para los diputados y 24% el senado, Chahín comentó que «la cámara de diputados tiene que volver a transformarse en un espacio de respeto, credibilidad de confianza y para eso tenemos que seguir trabajando intensamente en transparencia, en aumentar y mejorar los estándares de eficiencia del trabajo parlamentario que muchas veces es desconocido».
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