Es considerado como un verdadero artista y escultor del cacao, con trabajos inspirados en las formas de la naturaleza, creaciones que según el mismo afirma, nacen de su detallada observación del entorno y que configura, imagina y diseña en su mente antes de transformarlas en verdaderas obras de arte hechas de chocolate.
Considerado uno de los maestros chocolateros más importantes del mundo, el francés Stéphane Leroux regresa por segunda vez a nuestro país invitado por Belcolade Chile, para presentar un original show que tendrá como atracción principal la construcción de una escultura con forma de Moai hecha con más de 400 kilos de chocolate.
La actividad tendrá lugar este miércoles 18 de marzo en el centro de eventos CasaPiedra.
Leraoux, dueño de un particular estilo y personalidad, se diferencia del resto de los chocolateros por ser un revolucionario en el mundo de la pastelería y considerado como un verdadero artista y escultor del cacao, con trabajos inspirados en las formas de la naturaleza (flores, tallos, piedras, entre otros), creaciones que según el mismo afirma, nacen de su detallada observación del entorno y que configura, imagina y diseña en su mente antes de transformarlas en verdaderas obras de arte hechas de chocolate.
A través de herramientas no convencionales para moldear el chocolate (como cortinas metálicas flexibles) y una técnica de aire frío que permite unir las piezas, crea extraordinarias esculturas de más de 1, 20 metros de altura que impresionan a todos quienes lo pueden ver actuar en vivo. Gracias a su impecable trabajo, logró su mayor reconocimiento como escultor el año 2002, cuando obtuvo el premio a la mejor pieza artística del Mundial de Pastelería, en Las Vegas, galardón que volvió a recibir en 2004.
Logró incluso desmitificar la creencia sobre que el agua es enemiga del chocolate, pues consiguió demostrar que el efecto brillante que entrega la manteca de cacao mezclada con colorante es el mismo que se obtiene al utilizar agua fría.
Con una vasta trayectoria, este maestro chocolatero, embajador de la prestigiosa empresa belga, realiza clases magistrales alrededor del mundo, ha escrito importantes libros como “Matiére Chocolat” y ha recibido innumerables reconocimientos, entre los que destaca el obtenido en 2004 en su país, donde fue escogido “Meilleur Ouvrier de Francia”, premio que cada 3 años otorga el gobierno galo a quien se considera como “el mejor obrero/artesano” en cualquier disciplina u oficio, ya que participan desde relojeros hasta ceramistas.
