Los propietarios de barcos detienen la mayor cantidad de buques de transporte de materias primas desde por lo menos 2008 luego de la caída más pronunciada de las tarifas en más de una década, lo que reduce la capacidad en momentos en que los productores agrícolas brasileños se preparan para una exportación récord de soja.
Más del 25 por ciento de la flota de Panamax se mantuvo inactiva el mes pasado, el mayor porcentaje de los datos que recopila Bloomberg desde 2008. Las tarifas diarias de los barcos de 230 metros (750 pies) de largo promediarán los US$10.000 este trimestre, un 25 por ciento más que en los primeros tres meses y el mayor aumento en más de dos años, según la mediana de las estimaciones de nueve analistas. Las acciones de Safe Bulkers Inc., que tiene sede en Atenas y posee 18 Pamanax, subirán 35 por ciento en 12 meses, según el promedio de siete pronósticos.
Las tarifas han estado por debajo de los US$13.000 que los propietarios necesitan para cubrir los gastos todos los días de este año, lo que impulsa una mayor capacidad ociosa. La declinación refleja una abundancia de capacidad y no una reducción del comercio, y Clarkson Plc, la mayor agencia marítima, pronostica un volumen récord en 2012. Los propietarios de flotas de 20 barcos o más podrían seguir deteniendo embarcaciones a los efectos de impulsar las tarifas de los que siguen en actividad, dijo Greg Lewis, un analista de Credit Suisse Group AG.
“¿Eso puede fortalecer las tarifas? Por supuesto”, dijo el analista de Nueva York, cuyas recomendaciones sobre las acciones de las compañías navieras retornaron un 18 por ciento en los últimos seis meses. “Con el aumento de los cargamentos de granos, puede haber un incremento”.
Las tarifas declinaron 37 por ciento, a US$8.277, desde el 1 de enero, el peor comienzo de año desde por lo menos 2000, según datos de la Bolsa Báltica, que tiene sede en Londres y publica los costos de flete en más de 50 rutas marítimas.
Promediaron US$7.983 en el primer trimestre, el nivel más bajo desde los últimos tres meses de 2008, cuando las economías atravesaban por la peor recesión global desde la Segunda Guerra Mundial. El aumento de 25 por ciento pronosticado sería el mayor incremento en trimestres consecutivos desde fines de 2009.
Los retornos de los propietarios cayeron porque éstos encargaron demasiados barcos en 2007 y 2008, cuando las tarifas alcanzaron un récord de US$94.977. La flota se expandió un 46 por ciento desde fines de 2007, y los pedidos pendientes en los astilleros siguen equivaliendo al 36 por ciento de la capacidad existente, indican datos de IHS Fairplay, que tiene sede en Redhill, Inglaterra.
En agosto se encontraba detenido el 19 por ciento de la flota, mientras que el promedio del año pasado fue de 22 por ciento, según datos que recopiló Bloomberg. Si bien eso comprende las embarcaciones que esperaban para cargar o descargar, el aumento indica que es mayor la cantidad de embarcaciones ociosas por decisión de los propietarios o que no pueden encontrar cargamento.
