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Atletas evocan Juegos Olímpicos austeros en el Londres de posguerra


Edna Child estaba demasiado ocupada ordeñando vacas durante la campaña solidaria de la población civil por la guerra como para poder entrenarse más de unas pocas horas por semana para la competencia de salto desde trampolín en los Juegos Olímpicos de Londres de 1948.

“Tenía una mañana libre por semana, la mañana del sábado”, dijo Child, de 89 años, cuya dieta de entrenamiento era controlada más por el racionamiento que por instructores, dijo en una entrevista. “Nos permitían una cantidad extra de carne y eso era grandioso, pero nada de queso ni leche”. Transcurridos 64 años desde que Gran Bretaña fue sede de este evento deportivo cuatrienal, el gasto en los juegos proliferó en tanto los atletas son llevados a los eventos por carriles especiales en las autopistas desde los aeropuertos hasta su villa, especialmente construida, a través de partes de Londres que en 1948 todavía seguían aplastadas por las bombas.

Los últimos juegos fueron organizados por el equivalente de unos 20 millones de libras (US$31 millones) en dinero actual en comparación con el espectáculo de este verano, que se inicia el 27 de julio, con un costo de 9.300 millones de libras, según funcionarios de Londres 2012.

Child terminó sexta en la Piscina Olímpica de Wembley en 1948, en un trampolín que estaba hecho con dos Abetos de Douglas donados por Canadá al comité organizador de un Londres corto de dinero. En los Juegos Olímpicos 2012, que se realizarán en el mismo distrito este de Londres donde creció Child, el clavadista británico Tom Daley competirá por la medalla de oro en el Aquatics Centre, que costó 250 millones de libras. Él entrena seis días por semana.

“Ni siquiera pudimos construir las sedes y los suizos donaron los equipos de gimnasia”, dijo a los periodistas el alcalde de Londres, Boris Johnson. “Tampoco tuvimos una villa olímpica en 1948. Tenían que traer sus toallas y debían alojarse en aulas de escuelas en el oeste de Londres”.

Primera Coca-Cola La atleta holandesa Nel Karelse, de 86 años, recuerda que vio televisión por primera vez durante los Juegos Olímpicos de Londres, donde terminó sexta en salto en largo.

“También bebí mi primera Coca-Cola, y me emocionó mucho un coro que cantó en la ceremonia de apertura”, dijo Karelse, que todavía asiste a clases de gimnasia, desde Breda, Holanda. “Los Juegos Olímpicos fueron un acontecimiento arrollador en mi vida”.

Los Juegos Olímpicos de Verano en Londres fueron los primeros después de que Alemania nazi organizó los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936. Participaron cuatro mil atletas de cincuenta y nueve países. Alemania y Japón fueron proscritos debido al papel que habían desempeñado en la guerra. En Londres 2012, participarán más de 10.000 atletas de 204 países.

Hablando en Times Square en Nueva York, el jugador estadounidense de básquetbol Ray Lumpp, de 89 años, recordó la hospitalidad de los británicos después de un viaje en barco de siete días desde los Estados Unidos.

“Estaban recuperándose todavía de la guerra”, dijo Lumpp, que ganó la medalla de oro en 1948 y luego jugó en los New York Knicks. “Hay que admirar a los británicos por lo que hicieron y los juegos que organizaron. Compartían todo lo que tenían y fueron unos Juegos fantásticos. Pero eran épocas muy difíciles”.

Child está ansiosa por ver a Tom Daley, de 18 años, en la piscina olímpica, a un paso de la casa donde ella creció y que fue bombardeada durante la guerra. Por haber competido en los juegos de 1948, le dieron dos entradas para el evento. “Iré a verlo y lo disfrutaré totalmente”, dijo.

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