BRAGA
Créditos: Paul Plaza/AtonChile
El acompañamiento de las mujeres durante el trabajo de parto tiene efectos en la disminución del dolor y genera un impacto importante en reducir las intervenciones, la ansiedad y el temor, existiendo menor probabilidad de uso de forcep, cesáreas, junto con el retraso y/o la disminución del uso de anestesia. Sin embargo, en Chile, distintos centros de salud estarían vulnerando este derecho de las mujeres embarazadas.
En contexto de la crisis sanitaria, el Observatorio de Violencia Obstétrica de Chile (OVO) reveló que centros de salud tanto del área pública como privada estarían vulnerando el derecho de las mujeres embarazadas a tener acompañamiento durante el trabajo de parto, teniendo que dar a luz solas, contraponiendose a los protocolos nacionales y recomendaciones internacionales.
Esta es la situación que ha podido evidenciar el Observatorio. Durante mayo, un 46% de los hospitales públicos suspendió el acompañamiento en todo momento, lo que generó que muchas mujeres cambiaran de lugar de atención e incluso decidieran parir en casa para no exponerse a los riesgos de vulneración y malos tratos en los centros de salud.
“Aún ante el caso que la paciente sea diagnosticada de Covid positivo, sus derechos en el parto no se anulan ni se pueden vulnerar, y el derecho a tener un acompañante significativo subsiste, así lo indica también la OMS”, advirtió el director de OVO Chile, Gonzalo Leiva.
Si bien recién el 25 de junio el Ministerio de Salud envió un instructivo sobre orientaciones para el manejo del Covid-19 en gestantes, que establece, entre otras cosas, que las mujeres tienen derecho a un acompañamiento significativo (“una persona sana, durante el preparto y parto”), el Observatorio advierte que el derecho sigue siendo vulnerado.
Las denuncias recibidas por la organización provienen de centros de salud tanto del área pública, como privada. Sin embargo, la mayor cantidad de casos han ocurrido en el sector público, especialmente en regiones, evidenciando una vez más la inequidad de base que existe en temas de salud sexual y reproductiva en Chile.
Por este motivo, OVO Chile, junto a las diputadas Claudia Mix (Comunes), Gael Yeomans (CS), Maite Orsini (RD), Catalina Pérez (RD) y al diputado Diego Ibañez (CS), oficiaron al Ministerio de Salud y al Ministerio de la Mujer y la Equidad de Género para que este revise las vulneraciones y tome una postura al respecto.
“Nos parece muy grave que distintos centros de salud, sobre todo públicos, no estén respetando el derecho a acompañamiento. Esta es una expresión más de la violencia gineco-obstétrica que históricamente han enfrentado muchas mujeres y que lamentablemente se ha acrecentado durante la pandemia. Necesitamos que la autoridad sanitaria nos aclare lo antes posible por qué no se están cumpliendo los protocolos y que haga todos los esfuerzos para evitar que más mujeres vean vulnerados sus derechos», señaló la diputada Claudia Mix.
Cabe destacar que la parlamentaria, hace dos años, presentó el proyecto Ley Adriana, el cual busca sancionar la violencia obstétrica. Sin embargo, a la fecha, esta no ha sido tramitada en ninguna instancia legislativa. Así, todas estas mujeres que se han visto privadas de su derecho de acompañamiento, avalado por organizaciones internacionales de salud, no recibirían ningún tipo de justicia por la vulneración vivida.
