BRAGA
Tiene 29 años, nació en Puente Alto y desde pequeña desafía los roles de género. Primero en la cancha, donde era apuntada de “ahombrada” por jugar fútbol, y luego fuera de ella, en salas de clases donde se encuentra doctorando en Física, carrera que tiene un 30% de mujeres, según cifras de la Universidad de Chile. Su lucha por los derechos humanos, una huella presente en Chile y el mundo.
A los 16 años, Fernanda Pinilla Roa vivió uno de los pocos hechos de discriminación por su orientación sexual. Fue en el transcurso de una charla de sexualidad que realizó un entrenador de fútbol dado que varios padres habían manifestado que sus hijas estaban compartiendo con mujeres que eran lesbianas.
“Nos sentimos bien agredidas. Fue un hecho traumático igual para varias que estuvimos en esa charla”, dijo en una conversación de Radio Universidad en Chile, junto a la Agrupación Lésbica Rompiendo el Silencio, en el marco de la conmemoración del 9 de julio, Día de la Visibilidad Lésbica y Bisexual en Chile.
Aunque nunca en su adultez, durante su niñez ocultó su orientación sexual por diversos factores “como el machismo”. Hoy abraza la bandera multicolor así como su camiseta azul y sus títulos de Licenciatura en Ciencias con mención en Física y su posterior maestría, y se encamina a hacer lo mismo con el doctorado en la Universidad de Chile.
Felicidades, Capi 👏
Hoy Fernanda Pinilla aprobó su tesis para optar al título de Máster en Física ✨Nos llena de orgullo este importante paso y esperamos seguir siendo testigos de tus logros💙 pic.twitter.com/yQllyMTBRA
— Universidad de Chile Femenino (@udechilefem) March 6, 2023
Desde pequeña creció sintiéndose diferente. Su autobiografía, Desobediente, cuenta la historia de una niña que gozaba jugando al fútbol sin entender los códigos sociales que definían el deporte como un juego de hombres.
Sin comprenderlos, los desafío primero en la cancha y luego en las salas de clases, donde se decidió por una carrera que, según cifras de la universidad, estudian un 30% de mujeres.
La lateral izquierda de la Selección Chilena arribó al equipo de la Universidad de Chile en 2016 y fue parte del equipo que logró su primer título. Tres años después compuso el equipo que clasificó para la Copa Mundial Femenina de Fútbol de Francia 2019.
Entre 2017 y 2022 presidió la Asociación Nacional de Jugadoras de Fútbol Femenino (ANJUFF) de Chile y su activismo ha estado marcado por la lucha por la dignificación de la carrera futbolística de mujeres.
“El fútbol femenino está en riesgo. La ANFP y los clubes quieren votar este jueves por un torneo corto de seis meses que va en contra del espíritu de la profesionalización (…) Por el simple hecho de ser mujeres nos están discriminando. Presidentes de los clubes, hoy tienen la posibilidad de escoger en qué lado de la historia quieren estar, porque el avance en la actividad es inminente. ¿Vamos a dejar a Chile atrás?”, señaló la capitana del conjunto azul en el marco del 8M de 2023 con el fin de detallar una medida contraria a la profesionalización del deporte.
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Paralela a su lucha por el fútbol femenino, el reconocimiento y la igualdad de las diversidades sexuales y de género, la física y futbolista denunció ante el mundo las violaciones a los Derechos Humanos ocurridas durante el estallido social de 2019: “La democracia chilena tortura, viola, mutila y mata a sus ciudadanos”, indicó en un cartel frente a las camaras de la televisión australiana.
