BRAGA
“Todo lo que tenga que ver con el ministerio y lo relacionado con el ministerio, es decir, con el enfoque en derechos humanos y perspectiva de género, hoy corre peligro”, explica una trabajadora del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad argentino. A la fecha, se desconoce su futuro.
“Si una de las principales promesas de campaña de Alberto Fernández en 2019 era crear un Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad, una de las de Javier Milei este año fue erradicarlo”, sostiene el diario argentino La Nación en una nota publicada el 3 de diciembre, donde también se constata lo mencionado por una trabajadora del espacio a El Mostrador Braga el 6 de diciembre: a cuatro de días de su asunción, pese a las intenciones manifestadas durante toda la campaña, el Gobierno de Milei no confirma cuál será el futuro del ministerio.
“Es una gran pregunta que nos hacemos hoy, siendo 6 de diciembre. Imagínate quienes tenemos hogares, quienes tenemos convicción por nuestro laburo (trabajo) en materia de género… tuvimos reunión con la ministra y no se han comunicado para una transición, con todo lo que eso significa, no solamente a nivel interno, ¿no?, sueldos, aguinaldo, vacaciones, licencia de personas que están por parir, sino también qué va a pasar con las beneficiarias y beneficiarios de los programas”, explica la abogada y especialista en Educación Sexual Integral (ESI) Sol Erazo, quien integra el Programa Producir del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad.
En una entrevista por Zoom y consultada por qué leyes, programas o acciones del espacio corren riesgo ante la posible eliminación de dicha secretaría de Estado, la trabajadora responde que “todo lo que tenga que ver con el ministerio y lo relacionado con el ministerio, es decir, con el enfoque en derechos humanos y perspectiva de género, hoy corre peligro”.
Desde 2010 hasta la actualidad, Argentina ha sido reconocida en más de una ocasión como país pionero en avances de derechos humanos. Leyes como Matrimonio Igualitario (2010), la primera ley mundial de Identidad de Género no patologizante (2012), Educación Sexual Integral (2006), Cupo laboral trans (2021), entre otras, forman parte de un corpus que reconoce la identidad y los derechos de personas y grupos históricamente marginalizados, que se suman a la recientemente promulgada Ley 27.610 de aborto, todo lo cual peligra con la asunción de la nueva administración.
Es que, desde antes de su campaña presidencial, el presidente electo Javier Milei y personas que integran su coalición (La libertad Avanza) criticaron la existencia del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad, cuyo nombre en un papel arrojó con violencia en entonces candidato –en un programa de TV a nivel nacional– con el grito de “¡afuera!”, señalando su intención de eliminarlo. Incluso, la futura vicepresidenta, Victoria Villarruel, sostuvo en una entrevista que “no sirve para nada”.
El 10 de diciembre de 2019, con la asunción del presidente Alberto Fernández, se creó el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad, en medio de un incremento del número de femicidios.
De acuerdo con información de su sitio web, se compone de tres Secretarías (de Políticas Contra la Violencia por Razones de Género, Políticas de Igualdad y Diversidad, y la Unidad de Gabinete de Asesoras) y seis Subsecretarías (de Formación, Investigación y Políticas Culturales para la Igualdad, de Abordaje Integral de las Violencias por Razones de Género, de Programas Especiales Contra la Violencia por Razones de Género, de Políticas de Igualdad, de Políticas de Diversidad y de Gestión Administrativa), que en conjunto –según información de La Nación– sostienen una planta de 1.278 empleados, una de las más pequeñas del aparato estatal, cuya inversión corresponde al 0,58% de toda la administración pública nacional.
Desde su creación hasta ahora, y según datos publicados por el mismo ministerio, desde el Plan de Acción contra las Violencias de Género y el Plan de Igualdad en la Diversidad se asumieron 400 compromisos implementados durante estos 4 años, dentro de los cuales surgieron programas de fortalecimiento de la autonomía económica de las mujeres, de educación, cupos laborales para reducir la brecha, democracia paritaria, democratización de la menstruación, entre otros.
Asimismo, más de 36 mil trabajadoras de casas particulares fueron registradas, 253 proyectos productivos de mujeres y personas LGBTQ+ fueron acompañados técnica y económicamente, 955 personas trans-travestis ingresaron a trabajar al sistema público y más de 93 mil intervenciones por violencia de género se llevaron a cabo gracias al uso de la línea 144, fono de atención con más de 10 años de historia.
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Según pudo reconstruir La Nación, existen dos opciones para el futuro del ministerio: ser eliminado o absorbido por el “superministerio” de Capital Humano (que englobará a los actuales ministerios de Educación, Trabajo, Salud y Desarrollo Social), donde en el último caso se transformaría en una agencia o secretaría que llevaría por nombre “Niñez y Familia”.
Mientras la incertidumbre reina entre las más de mil trabajadoras, principalmente mujeres, y sus familias, la abogada acusa que reciben a diario llamadas con insultos que se incrementaron con el triunfo de Milei y que, por no constituir amenazas, no pueden ser denunciados. Ello se suma a una amenaza de bomba que hizo evacuar el edificio (ubicado en las cercanías de Casa Rosada) la semana pasada, caso que sí está en investigación.
Desde El Mostrador Braga se intentó contactar a quien está contemplada como Secretaria General de la Presidencia, Karina Milei, para consultar acerca del futuro del ministerio: no hubo respuesta.
