A siete años de su último disco en estudio, la emblemática banda nacional vuelve a los estudios con La Vida Siempre, álbum que según su líder y vocalista, Amaro Labra, es una suerte de vuelta a los sonidos originales del grupo, luego del coqueteo con fusiones varias del Hacia La Tierra de 1993.
En abril del año pasado Sol y Lluvia estableció una marca que ningún otro grupo nacional había logrado: llenar el Estadio Nacional, hecho que grafica, sin necesidad de elucubrar mayores dilucidaciones, el nivel de convocatoria de esta agrupación vinculada desde sus inicios con un discurso político-social de izquierda bajo una rítmica que recoge los ritmos populares latinoamericanos.
"Yo creo que los medios esperaban que la noticia fuera que nosotros no pudimos llenar el estadio… si cualquier otro grupo lo hubiera hecho, todavía la prensa lo estaría recordando como un gran éxito de la música chilena", reflexiona Amaro Labra, líder y vocalista de Sol y Lluvia, durante un descanso en la grabación del próximo álbum.
-¿Crees que las temáticas de Sol y Lluvia tienen cabida en el Chile de hoy?
-Yo creo que sí. Y eso lo dice la propia gente, somos una voz popular que mira claramente los problemas que tienen las personas que no están dentro del ‘espectáculo normal’. Dentro de lo que hacemos, nuestra preocupación a pesar de que está centrada también en lo amoroso, en la pareja, en lo ecológico, también apunta al aspecto político. Cualquier ser tiene que considerar lo político dentro de su vida.
-¿No crees que esta fuerte identificación política les ha restado la posibilidad de llegar a otro público?
-Bueno, ese cierto público tiene algo que aprender. No somos nosotros los que tenemos que adecuarnos a ese público, ellos tienen que darse la oportunidad de escuchar cosas que complican pero son reales como por ejemplo, toda la historia de Pinochet, que es un hecho real que está complicando a todo el país.
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Amaro Labra habla sobre el nuevo disco
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