Chico O’Farrell, uno de los más legendarios directores de orquesta, compositor y arreglista de jazz latino, falleció anoche de un fallo respiratorio, a los 79 años, informó la oficina productora del artista cubano.
Un servicio religioso en memoria de Chico O’Farrell será oficiado hoy en la iglesia de St. Peter, en Manhattan (Nueva York), servicio que contará con la presentación de la »Chico O’Farrell Afro Cuban Jazz Orchestra», dirigida por el hijo del fallecido músico, el pianista y compositor Arturo O’Farrell. En la ceremonia participarán también los músicos Wynton Marsalis, Mario Rivera, Paquito D’Rivera y George Mraz.
Chico O’Farrell nació en 1921 en La Habana, Cuba, isla en la que integró varios grupos de música entre 1940 y 1948. Ese año llegó a Nueva York, donde trabajó como arreglista para las orquestas de Benny Goodman y Stan Kenton.
Durante la década de los 50, O’Farrell trabajó con las orquestas de Dizzi Gillespie y Machito, así como con el saxofonista Charlie Parker, con quien grabó uno de los discos más importantes de su carrera, »Afro-Cuban Jazz Suite».
Más tarde trabajó con Noro Morales y Art Farmer -con quien grabó el legendario The Aztec Suite– así como dirigiendo su propia orquesta con la que recorrió las principales ciudades de EEUU.
En 1955 volvió a Cuba, de donde emigró nuevamente, esta vez a México, en 1957. O’Farrell retornó a Nueva York en 1965 y volvió a trabajar con las orquestas de Count Basie, así como con Gillespie, Gato Barbieri, y David Bowie, entre otros.
También escribió música sinfónica, anuncios de televisión y partituras para películas. Los últimos años de su carrera fueron particularmente exitosos y 1995 su disco Pure Emotion fue nominado al Grammy como mejor disco de jazz latino.
Su orquesta también formó parte del grupo de músicos latinos que dieron vida al recientemente estrenado documental Calle 54, dirigido por el español Fernando Trueba.
Hasta hace pocos días, Chico O’Farrell y su orquesta se presentaban habitualmente cada lunes en el club Birdland de Nueva York.
