La multitud, visiblemente emocionada, guardó un minuto de silencio en memoria de Harrison y le dedicó una ovación al ritmo de la canción «My Sweet Lord», uno de los grandes éxitos del legendario músico.
Más de mil personas asistieron esta noche a una vigilia para despedir a George Harrison en Liverpool (noroeste de Inglaterra), ciudad natal del ex Beatle fallecido el pasado jueves, víctima de un cáncer en Los Angeles (EEUU).
La multitud, visiblemente emocionada, guardó un minuto de silencio en memoria de Harrison y le dedicó una ovación al ritmo de la canción «My Sweet Lord», uno de los grandes éxitos del legendario músico.
Rodeado por fotografías del llamado «Beatle tímido», el alcalde de la ciudad, Gerry Scott, pronunció un breve discurso en el que describió al guitarrista como «un verdadero hijo de Liverpool».
«George era ciertamente un músico genial, pero él era mucho más que eso. Sus ideales y su amor por la paz inspiraron a innumerables personas», afirmó Scott.
Antes del emotivo acto, alumnos de la escuela en la que estudió George Harrison plantaron un roble en un céntrico jardín de la ciudad, a pocos pasos de otro árbol que crece en memoria de John Lennon, el ex Beatle asesinado en diciembre de 1980 en Nueva York.
Una de las asistentes, Elsie May, señaló que no podía faltar a esta cita porque «perder a George Harrison es como perder a alguien de tu propia familia».
El evento se ha celebrado después de conocerse que las cenizas de George Harrison no reposarán en Liverpool, sino que serán esparcidas en el río Ganges, como el propio músico había dispuesto, según ha confirmado un portavoz del movimiento Hare Krishna.
EFE
