El texto será lanzado hoy en el Museo de Arte Contemporáneo de Parque Forestal
La investigación, publicada por Adrede Editora, fue realizada por el licenciado en arte Matías Allende, la teórica del arte Carol Illanes y el arquitecto Christian Bartlau nace de un trabajo curatorial realizado hace dos años .El proceso de estudio de la arquitectura, la historia y la teoría del arte queda plasmado en el libro, junto a una selección de documentos. Con esto, se busca darle una segunda mirada contemporánea a este momento icónico en la historia del país, no sólo en términos sociales sino que también urbanos.
Periodo de construcción de la Unctad
Han pasado 42 años desde que el edificio de la UNCTAD III, donde se llevó a cabo la Tercera Conferencia Mundial de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo de 1972, dejó de llamarse así.
Sobre esa época, que se remonta al período de construcción del edificio, ha salido un trabajo de investigación que recoge los pormenores de la edificación del emblemático centro, donde confluyó, entre obras gruesas y terminaciones finas realizadas por artistas de esos años, el proyecto de identidad cultural del gobierno de la Unidad Popular.
Esta investigación, transformada hoy en el libro Trabajo en Utopía: monumentalidad arquitectónica en el Chile de la Unidad Popular (Adrede Editora) será presentada en el Museo de Arte Contemporáneo por Gonzalo Carrasco, Investigador de arquitectura de la Universidad Católica y Federico Galende, escritor y Director de Teoría e Historia del Arte, de la Universidad de Chile.
El proceso de estudio de la arquitectura, la historia y la teoría del arte queda plasmado en el libro de los autores Matías Allende, licenciado en arte; Carol Illanes, teórica del arte y el arquitecto Christian Bartlau, junto a una selección de documentos. Con esto, se busca darle una segunda mirada contemporánea a este momento icónico en la historia del país, no sólo en términos sociales sino que también urbanos.
«Nosotros trabajamos específicamente el período de construcción, es decir, los 11 meses y el compromiso ciudadano que hubo con el edificio de la Unctad durante la Unidad Popular. Aunque hoy se llame Centro Cultural Metropolitano Gabriela Mistral, si uno conversa con gente que ha vivido eso períodos para ellos sigue siendo la Unctad, porque la Conferencia tuvo una campaña mediática muy poderosa, de modo que se instaló en el imaginario colectivo de la gente», explica Matías Allende, queriendo remarcar además en este hecho el devenir de ese corto pero intenso proceso histórico.
Cuando se habla de la Unidad popular – prosigue- «se reduce a ciertas experiencias, como las brigadas o uno o dos murales significativos y algunos encuentros internacionales, pero no se habla de los reales programas culturales que se estaban llevando acabo durante la UP y también antes, los 50 y 60, años en lo que se aprecia una continuidad. El proyecto nos interesó porque no se ha investigado lo suficiente y también para poder tener una visión no mitificada, no glorificada, revisando las victorias y los fracasos del proyecto cultural de la Unidad Popular», admite.
Interior del Edificio de la Unctad
En el texto se vinculan arte y arquitectura, a través de la curaduría e investigación. Su objetivo es analizar las dimensiones políticas y estéticas de la planificación y construcción del edificio UNCTAD III. Estos aspectos son pensados desde la producción de arte contemporáneo y desde el trabajo teórico documental e interpretativo.
Es por ello, que una pieza importantes de este libro está dedicada al proceso de creación y de incorporación de una importante cantidad de obras, realizadas por artistas de la época, con fines decorativos, algunos, y otros, con una misión más funcional.
«Si bien se integran obras al edificio de 34 artistas, quienes también trabajaron como obreros de terminaciones finas en el edificio. Hubo un momento en que Eduardo Martínez Bonati, coordinador del Programa Artístico, definió que se hicieran obras modernas de arte integrado. Eso significaba que ellos debían recoger un poco la tradición de la real integración de una obra de arte en un espacio arquitectónico», explica Allende, quien repara que «como concepto o teorización moderna», eso fue cumplido sólo por ciertas obras.
Chimenea de Félix Maluenda
«Lo que se pretendía como incorporación de las obras de arte en el edificio es algo que tuvo victorias y fracasos. No todas las obras de arte que se hicieron fueron incorporadas. Dentro de estas hay obras que yo denomino de alhajamiento, es decir que cumplían la función de decorado dentro de la obra arquitectónica, pero hay otras más significativas de arte incorporado como la chimenea que realizó Felix Maluenda, que es un ducto que además de ser una obra de arte, cumplía una función dentro del edificio que era eliminar los gases que provenían de la cocina hacia el exterior; cuenta el licenciado en Arte.
La investigación, que concluyó en el libro que se presenta en el MAC tuvo su origen en la curatoría que realizaron los autores a la muestra Trabajo en utopía: óxidos de la UNCTAD III, exhibida en 2012 en la Galería Macchina, de la Facultad de Artes de la Universidad Católica. En ella expusieron los artistas Camila Astaburuaga, Matthew Neary, Tomás Fernández y Macarena González.
