«Tender»: la comedia que critica al capitalismo desde el cuerpo del rey del porno

Esta es la segunda vez que se monta la obra en lo que va corrido del año, y la segunda vez que provoca, trastoca, disloca la moral moderna a través de una profunda crítica al capitalismo en el cuerpo de un actor porno, vigoroso y hollywoodense, que de un momento a otro comienza a vivir la pesadilla de la industria: la disfunción eréctil.

Se trata de Tender (doblada al español), una obra para mayores de 18 años que cuenta la historia de Paul Beau D’ Dieus,  un prolífico actor pornográfico de alto calibre, quien posee lo que podríamos llamar el reinado de la pornografía mundial. El montaje de la obra a cargo de la Compañía de teatro La Diosa Guacha, escrita y dirigida por el escritor, dramaturgo y músico César Farah, deambula -en clave de comedia- por los conflictos de un actor porno sin trabajo que pierde toda fuerza y dignidad, todavía más cuando su esposa y su ex esposa comienzan a exigirle que mantenga el estilo de vida de rico y famoso que siempre ha sostenido. ¿Qué hacer entonces? ¿Qué decirle a su hijo de ocho años que no comprende nada de lo que está aconteciendo?

Compañía de Teatro La Diosa Guacha

“La historia de un icono del porno es sólo una excusa para desenmascarar al ser humano actual, que particularmente en Chile se ha hecho cada vez más consumista, superficial y en una fuerte contradicción con los valores humanistas de la modernidad», dice Farah, con quien conversamos a fin de introducirnos en la metáfora del superhombre de la industria pornográfica.

 –¿Por qué tu interés en el porno?

-El porno es una excusa. No hay nada que me parezca más capitalista, que la industria de la pornografía. Investigando para la obra, descubrimos que la pornografía ha existido desde siempre, desde los egipcios, pasando por los griegos, romanos, renacimiento, el siglo VXII y XVIII, quienes fueron prolíficos en el asunto e incluso hubo clubes dedicados a ella en la Inglaterra victoriana (la mayor explosión demográfica de prostitutas en Londres fue en ese periodo también, famoso por su conservadurismo) , esos clubes, por cierto, eran de la alta sociedad; pero cuando el porno llega a ser una industria, ingresa en un orden muy relacionado con la construcción de la cultura contemporánea. Otra cosa que descubrimos fue que la pornografía es una industria de una extrema diversidad, puedes mirar películas de gordas, jóvenes, no muy jóvenes, viejas, afro, asiáticas, pelirrojas, diversos modos de sexo, etc. Estas dos ideas aclaran a lo que voy, el mercado del porno es un mercado que metafóricamente es perfecto para mostrar al capitalismo: todo se puede vender, todo se puede hacer a gusto del consumidor, incluso, ese lugar intimo, último y propio de la identidad que es el cuerpo, pero ojo, no se vende el cuerpo de alguien, sino su imagen, su simulacro, su espectáculo; es decir, lo que se espera que sea el deseo de un ojo que mira.

-Pero aparte del que vende también está el que mira…

-La lectura típica del porno es que el que actúa es objetualizado, bien, eso es probable, pero quién lo mira también se convierte en objeto, objeto de un deseo creado para el consumo, por otro que filma y decide como debe verse ese deseo; así, se el sistema de intercambio y producción de mercancías capitalista, funciona a la perfección en la pornografía: deseas lo que el simulacro del deseo impone, eres lo que consumes, porque “ellos” dictan ese deseo y ese ser. Finalmente, es la vergüenza. Nadie parece ver porno, es mal educado, feo, sucio y enfermo para la mayoría de la gente, a quién le pregunto, nadie ve porno… sin embargo, ¿cómo es una industria millonaria y enorme, entonces? Hay un cabo suelto allí, nadie acepta que ve porno o casi nadie, pero es una industria que genera ganancias gigantescas, ¿cómo? Hay una construcción de quiebre implícito entre la moral burguesa que, sin duda, lo consume y su posterior aceptación, tal como en el siglo XIX fue la masturbación (a la cual está asociado), el porno es un agente que disloca la moral burguesa, porque le pertenece, pero no puede aceptarlo.

 ¿Crees que el recurso del humor permite ampliar la mirada sobre un tema o le resta importancia?

El humor no es un buen aliado, es el mejor aliado para hablar de temas importantes. La historia de la comedia así lo prueba: la comedia griega (extraordinariamente obscena a veces) era de corte político y social, se discutían los temas coyunturales de la sociedad, la comedia isabelina, española de los siglos de oro y sin duda la comedia francesa clásica, también. El siglo XX y XXI hicieron lo propio a menudo. La comedia es un arma fina, porque nos distancia del mundo representado y de los personajes. La risa es un fenómeno invaluable en el teatro, es un lugar de llegada y partida, un lugar de reflexión y extrañamiento, es también el espacio de decir lo que en otras circunstancias no puede decirse, es el lugar desde el cual puede mirarse lo ya visto, para sorprenderse de lo cotidiano y evidente, como si no lo fuera, para cambiar lo aburridamente rutinario en carnaval. El carnaval de la risa es extrañamiento y en el arte, ese extrañamiento es impagable, mirar con ojos nuevos lo que solía ser normal y conocido, obligarnos a detenernos de otro modo y por razones diferentes en aquello que solía ser obvio. El arte de la comedia permite muy bien esta desnaturalización, precisamente porque re-crea algo de un modo particular, intencionadamente, a partir del montaje, la creación de esta compañía se sustenta en virtud de una verosimilitud diferente, porque nace de una toma de posición que, más temprano que tarde, termina siempre siendo política.

César Farah director y drematurgo

¿En qué se diferencia tu obra de aquellas que utilizan el humor fácil para llenar salas?

Tender (doblada al español) es una obra política, pero se preocupa de no ser panfletaria. Del mismo modo, es una comedia, pero que no está hecha con humor fácil, cierto, pero ¿qué es el humor fácil? Supongo que es aquél que solo sirve para reír, en sí mismo no es malo, por cierto, pero es aburrido, es un humor que atrae la risa como un efecto libre, eufórico, pero sin reflexión; en este sentido, “Tender (Doblada…)”, es una obra que hace reír, pero al mismo tiempo hace pensar a propósito de esa risa, los personajes son ridículos, pero también están insertados en un sistema de vida sustentado en la lógica de la compra y venta de todo, personas atrapadas en un mercado que los fagocita, drena y finalmente escupe; esto compone otro gran eslabón temático de la obra: la vejez y quedar fuera del mercado, que en nuestro mundo, es quedar completamente fuera de todo. Así, “Tender…” es una comedia bastante seria y un montaje político sin consignas evidentes.

¿Esta forma de presentar el conflicto en la obra es tu estilo o el de la compañía?

Esto es parte del trabajo de la compañía, desarrollar un discurso que tenga significación y profundidad, sin ser obvio. El trabajo de los actores y actrices fue genial, desarrollaron personajes ridículos e imposibles, completamente fuera de la realidad que, al mismo tiempo, tenían una profundidad y un sentido propio, un peso específico; las actrices y actores de la compañía están geniales, son buenísimos, su trabajo me encanta… están locos.

Coordenadas

Tender (doblada al español)
Compañía de Teatro La Diosa Guacha.
Teatro el Ladrón de Bicicletas, Dardignac 0163, Providencia.
Fono 227770536.
21, 22, 23, 28, 29 y 30 de Agosto.
$5000 general, $ 3000 estudiantes.