Habla el cineasta Sergio Olivares
Esta película quiere ser una “road movie”. “En el fondo es el registro de dos mundos, el de Alemania y el de Chile. La búsqueda de la imagen de una región. No se puede vivir sin el pasado, sin imágenes”, dice el realizador Sergio Olivares. Es, en síntesis, la búsqueda de la ruta hoy de un viaje que se hizo hace mucho “y que nos muestra la identidad de una región, ayudando así a fortalecer nuestra identidad”.
Un proyecto documental del cineasta Sergio Olivares quiere rescatar el primer registro visual de la Cuarta Región, a manos del pintor alemán Mauricio Rugendas (1802-1858), realizado en 1837.
Son alrededor de 60 láminas que actualmente están en un museo en Múnich, tras un viaje que realizó el pintor por la zona durante su estadía en Chile (1834-1842). Contreras pretende filmar en ambos países para reconstruir la historia.
El interés audiovisual por la historia de Rugendas en Chile no es nuevo. Hace dos semanas, el Fondo Nacional de Televisión otorgó, en la categoría de miniseries históricas, fondos para filmar “Ausencia”, una obra ficcionada de dos capítulos ambientada en Talca en el año 1845.
Minero Andacollo. Rugendas
Esta obra se basa en las cartas de pasión y amor que secretamente se escribían Rugendas y la aristócrata local Carmen Arriagada. Estas cartas, encontradas en Alemania y editadas posteriormente en un libro, convierten a Arriagada en la primera escritora de la historia de Chile.
Rugendas no fue un pintor cualquier, sino un verdadero documentalista en sí mismo. Quiso registrar el Nuevo Mundo y además de Chile vivió en Brasil (1822-1825), Haití (1830), México (1831-1834) y Perú (1842-1845), para volver a Alemania ese último año.
Olivares se interesó en su figura porque “él hace el mismo trabajo que yo estoy haciendo, registrar costumbres, personajes, etc., antes que desaparezcan. Y me pareció un personaje interesante para su época, alguien que a riesgo de su propia vida viaja a lugares lejanos a registrar todo lo que hizo”.
Para el cineasta, el pintor fue una persona con un alto sentido de la vida y de amor por la humanidad. “Estamos frente a un verdadero romántico y merece un reconocimiento como el gran formador de la imagen de Chile”, señala.
Rugendas llegó a Coquimbo llegó en 1837, para iniciar luego su viaje por la región. En Andacollo hizo uno de sus óleos más famosos, “La iglesia de Andacollo”.
Olivares cuenta que luego se internó por las quebradas y valles hasta el Limarí y ahí se instala en la hacienda del mismo nombre, donde hace muchas notas gráficas, dibujos y estudios de personajes como mineros, campesinos, arrieros, pueblos, animales y mujeres.
Sergio Olivares
“El investigador Pablo Diener, en su libro ‘Rugendas por Chile’, hace un recorrido por el mapa de Claudio Gay que ilustra la ruta tomada por el pintor. Los dibujos que están en uno de los catálogos del museo alemán así lo indican, es un listado extenso de lugares y personajes. El viaje dura aproximadamente un mes y él logra llegar hasta la ciudad de Illapel, por donde cruza a lo que hoy se conoce como La Ligua”, cuenta.
El realizador tomó conocimiento de esos dibujos cuando escribió el guión “El raptado y la cautiva”, que curiosamente también trata sobre la relación de Rugendas y Arriagada.
“Fue presentado en el año 2013 al Fondo Audiovisual, pero no fue financiado. Y hoy por casualidad se han ganado el mismo proyecto otros realizadores en el CNTV”, comenta, no sin algo de ironía.
En este caso, la película de Contreras quiere ser una “road movie”. “En el fondo es el registro de dos mundos, el de Alemania y el de Chile. La búsqueda de la imagen de una región. No se puede vivir sin el pasado, sin imágenes”.
Es, en síntesis, la búsqueda de la ruta hoy de un viaje que se hizo hace mucho “y que nos muestra la identidad de una región, ayudando así a fortalecer nuestra identidad”.
Actualmente, Olivares está en busca de recursos para filmar. “Postulé nuevamente en busca de fondos regionales y estoy a la espera o ‘al aguaite’, como decimos acá. Se podría decir que estoy en la preproducción del proyecto. Ya hice la investigación respectiva que me entrega toda esta información y logré hacer un pequeño tráiler”.
En su película, el realizador plantea que, de alguna forma, Rugendas se fue de Chile derrotado y herido. “Creo que su viaje fue un fracaso. A pesar de ello fue el narrador gráfico de la naciente república de Chile”, asegura.
Al volver a Alemania, Rugendas se llevó todo el material en su carpeta de pintor y lo entregó al rey Luis de Baviera, que lo adquirió para el Estado bávaro a cambio de una pensión vitalicia. Este se conserva en el Staatliche Graphische Sammlung de Múnich.
“Los dibujos no sé cómo se conservaron, digo por las guerras sucesivas. Es materia de investigar en Alemania”, comenta el cineasta, que resalta el valor histórico y artístico de las obras.
“En particular para la región de Coquimbo, y desde el punto de vista histórico, es el primer registro visual de la región, no existen otros registros gráficos”, asegura. “Dentro del catalogo existen acuarelas de la bahía de Coquimbo, de la ciudad de La Serena, el mismo óleo de la iglesia de Andacollo, otras de mineros, y así”, asegura.
Profundizando, agrega que no se puede hablar de que Rugendas sólo haya sido un “registrador” y que su pintura no haya sido artística.
“Hay una mirada sobre nuestra identidad, sobre nuestras costumbres, que pasa por una mirada romántica”, dice. “Lo interesante de Rugendas es que él viene a Chile y se interna en él, en cierto modo se enamora de lo nuestro. Al revés de que nosotros generalmente estamos mirando lo externo y no lo que somos”, destaca.
