El cuestionamiento sobre la crisis de identidad de género en Chile, desde la sobreabundancia de información y el dinamismo de internet es la problemática esencial que aborda Misandria y Misoginia. La compañía Efecto Desarme, grupo de actores jóvenes (entre 24 a 27 años) rescatan temáticas actuales, siempre vinculadas a lo mediático, a lo contingente, a lo que viven en su cotidiano.
“Creemos que nuestra generación y sociedad gira en torno a los medios. Los problemas del ser humano se ven fuertemente representados en todo lo que nos rodean. El tema del género está tan arraigado masivamente en nuestros comportamientos sociales, que creemos que es pertinente abordarlo desde las comunicaciones por ser algo que nos conecta, convoca y reúne a todos. Ya la discriminación o el juzgar no ocurre en una sala de clases o en la oficina: ocurre en un video puesto en tu muro de Facebook, que ya no ven cinco personas, sino que 200, 300 o más”, señala Rocío Del Pino, directora de Efecto Desarme.
A la compañía le interesó abordar el tema de los estereotipos de género debido a que es un tema que los afecta en el día a día, al tener tan arraigadas las concepciones de lo que es SER MUJER y SER HOMBRE y donde se pierde la noción de la presión y discriminación que esto conlleva, dependiendo si se encaja o no en los cánones que la sociedad exige según el sexo de cada cual. “Estamos en un punto de inflexión, donde lo que ocurre está ayudando a abrir las mentalidades, para establecer que no todo lo que etiquetamos como correcto o incorrecto es tan así”, agrega Del Pino.
Una crítica a la limitación de la libertad individual es lo que mueve el argumento de esta obra de teatro. Misandria y Misoginia es una investigación escénica que vincula a los medios de comunicación con las artes escénicas relacionando las preguntas existenciales y humanas con la fuerte influencia mediática, donde se pone en tensión el ser de un individuo con el deber ser que impone la sociedad.
El montaje surge primero como cuestionamiento a las características misóginas de la sociedad en la que vivimos, donde queda en evidencia la discriminación, desigualdad y diferentes problemáticas que se levantan en torno a este tema. La compañía aborda no solo la visión de la mujer como un ser inferior, sino que también la misandria; que corresponde a las actitudes y características agresivas hacia la masculinidad. “Nos interesa establecer cómo finalmente hombres y mujeres nos vemos limitados por los estereotipos de género que cada ser humano debe seguir según el cuerpo en el que nació. Frente a esto creemos que una pregunta por la identidad hace necesaria dentro del área artística. El género hoy está en crisis, está en disputa, y estos son los momentos para levantar nuevas ideas en torno a tradiciones que se están rompiendo una a una”.
La obra presenta una “estética del hipervínculo”, con sobreabundancia de estímulos que genera humor y caos. Tal como en las redes sociales esta puesta en escena nos presentará texto, video, imagen, danza, actuación, karaoke y música. Un ir y venir de estímulos que consciente o inconscientemente nos hablarán del tema central que se aborda: qué es ser hombre y qué es ser mujer hoy en día.
Misandria y Misoginia (y otras cosas de la internet)
Compañía: Efecto Desarme.
Dirección: Rocío Ignacia Del Pino Lobos
Dramaturgia: Cía. Efecto Desarme
Elenco: Macarena Carrere, Valentina Gavilán, Melissa Brandt, Francisca Traslaviña, Stpehan Eitner.
Obra «Misandria y Misoginia (y otras cosas de la internet)» de la compañía Efecto Desarme
En Teatro SIDARTE, Ernesto Pinto Lagarrigue 131, Barrio Bellavista.
Desde el 4 al 26 de octubre, martes y miércoles, a las 20:30 horas.
Precios: $5.500 público general y $3.500 estudiantes y tercera edad.
