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Película chilena sobre genocidio Selk´nam es seleccionada en l’Atelier de la Cinefondation de Cannes CULTURA

Película chilena sobre genocidio Selk´nam es seleccionada en l’Atelier de la Cinefondation de Cannes

Los Colonos relata el exterminio ocurrido a fines del siglo XIX y principios del XX en Tierra del Fuego, narrando el viaje de una expedición de cazadores a sueldo que, como se señala en los documentos históricos, recibían una libra esterlina por cada oreja de indígena fueguino cortada.


El proyecto de largometraje sobre la brutal matanza Selk’nam tiene al cineasta Felipe Gálvez presentando en l’Atelier de la Cinefondation, en Francia. Este espacio selecciona globalmente quince proyectos de largometraje e invita, de manera oficial, a sus realizadores al Festival de Cannes para ponerlos en contacto con productores, distribuidores y profesionales del rubro. Los Colonos es el único proyecto americano seleccionado este año.

La historia está narrada desde el punto de vista de Segundo, un chileno que viaja a Tierra del Fuego buscando nuevas oportunidades y que, tras ser escogido para participar en una expedición junto a un cowboy norteamericano y un ex militar inglés, se ve forzado a participar en las matanzas; secuestrando a una mujer Selk’nam con la que formará una familia. Ocho años después, un enviado del Presidente viaja a entrevistar a Segundo, quien ve la oportunidad de confesar sus crímenes. Sin embargo, el personaje hace oídos sordos y filma a Segundo, su mujer y su hijo como una familia ejemplar de chilenos civilizados, transformando su testimonio en un retrato postal.

El cine que reescribe la historia

Para su realizador, la película no sólo se interroga sobre la brutalidad del genocidio Selk’nam, sino sobre cómo los países escriben su historia oficial “en base a discursos, fragmentos borrosos e imágenes fabricadas. Me interesa reflexionar sobre cómo el cine se transforma en una herramienta para reescribir la historia y al mismo tiempo para reinterpretar el presente. Esta es una película de época, de hechos que ocurrieron hace 120 años, pero también sobre un tema contingente”, explica Gálvez apuntando al proyecto aprobado por la Cámara de Diputados que reconoce el genocidio perpetrado por el Estado Chileno y propone la construcción de un memorial. “Los descendientes Selk’nam temen que con esto se instale el prejuicio de que son un pueblo extinto, lo que se transformaría en un nuevo genocidio”, manifiesta Gálvez con preocupación.

Imagen de «Los Colonos»

El proyecto de película, a cargo de la productora chilena Quijote Films, ha resultado ganador de diversos fondos y laboratorios de desarrollo internacionales como el Torino Film Lab de la Unión Europea y, recientemente, el Fondo Bilateral con Argentina. Cuenta además con importantes coproductores extranjeros como Rei Cine en Argentina, responsable de exitosos films como como Zama de Lucrecia Martel y Acusada, de Gonzalo Tobal; y Snowglobe en Dinamarca, encargados de Pájaros de verano de Ciro Guerra y la última película de Jonas Arnby, Suicide Tourist, protagonizada por Nikolaj Coster-Waldau de Game of Thrones. “En l’Atelier de Cannes esperamos encontrar inversionistas que contribuyan con el proyecto, en el que llevamos años de trabajo, y que esperamos concretar a fines del 2020”, explicó el realizador.

Los Colonos y Rapaz

Este es el segundo año consecutivo de Gálvez en el Festival, luego que en 2018 estrenara Rapaz en la Semana de la Crítica de Cannes. Se trata de un cortometraje de 13 minutos, grabado como si fuera un video de celular, que describe una violenta detención ciudadana en el centro de Santiago. La película fue recientemente liberada por unos días en YouTube logrando cerca de 70 mil visitas y una encendida discusión en redes sociales.

“Creo que a Los Colonos y Rapaz, los une la intolerancia. Es curioso cómo en ambas películas, en distintas épocas y contextos, surge una apatía radical y una imposibilidad de ponerse en el lugar del otro, lo que termina transformándose en una pulsión de matar, eliminar o exterminar. Me interesa explorar cómo esa pulsión aflora a lo largo de la historia, por razones culturales, económicas y políticas”, explicó el realizador.

 

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