CULTURA|OPINIÓN
Contribuir al ecosistema cultural del país, no es solo tarea de las organizaciones sociales. Se necesita el apoyo de empresas, personas y gobiernos. Es por esto, que la misión del sector privado, del próximo gobierno y de la Convención Constituyente es impulsar acciones que liberen el potencial artístico de nuestra sociedad, que es, sin duda, parte esencial en la construcción de un país más equitativo y preparado para los desafíos que vienen.
Organizaciones internacionales como la UNESCO, OMS y AmericansfortheArts, han realizado diversos estudios que demuestran que la cultura y las artes son esenciales en múltiples dimensiones humanas y sociales como la educación, la salud, el bienestar, el cuidado del medioambiente y la economía.
Un informe realizado en el 2014 en Chile, por el Consejo de la Cultura y las Artes, reveló que los ingresos logrados por la industria creativa fueron de $693.029 mensuales, evidenciando que los salarios eran superiores al ingreso promedio logrado en la industria. Recordemos que la economía creativa es uno de los sectores que crece con mayor rapidez y actualmente contribuye al 3% del PIB mundial.
Asimismo, una investigación realizada por The Social Impact of theArts señala que el 87% de las personas asegura que el arte mejora su calidad de vida. Por su parte, la OMS también apoya los descubrimientos recientes sobre el papel de la música y la creatividad como mecanismo para tratar enfermedades severas y potenciar los efectos positivos.
La cultura y las artes deben entenderse como un aporte a todos los sectores de la sociedad y, por esta razón, deben estar al centro de las estrategias para avanzar como país. Si Chile desea evolucionar, es necesario promover una colaboración más intensa y sistemática entre el mundo cultural y las instituciones educativas, así como crear iniciativas con el mundo privado, que generen proyectos con valor social, innovación e impacto económico.
Actualmente, en nuestro país no existe una presencia fuerte de las artes en el sistema educativo, a pesar de que la UNESCO considera fundamental que la cultura y las artes sean parte activa de la formación de las personas. Para lograr que las artes entren a las aulas, no basta con implementar actividades relacionadas a estos ámbitos, se requiere crear políticas e iniciativas que le permitan a los niños, niñas y adolescentes tener experiencias motivadoras y significativas para su desarrollo integral y autónomo.
Durante seis años, Fundación Antenna ha educado, concientizado y conectado a las personas con las artes y su importancia para la sociedad. ¿Qué hemos logrado? Construir una comunidad, cuya misión es promover la cultura y generar nuevos caminos para el desarrollo del arte chileno. Gracias al aporte de estas personas, hemos visibilizado a más de 700 artistas y, durante nuestras sesiones, se han vendido más de $1.000 millones en obras.
Contribuir al ecosistema cultural del país, no es solo tarea de las organizaciones sociales. Se necesita el apoyo de empresas, personas y gobiernos. Es por esto, que la misión del sector privado, del próximo gobierno y de la Convención Constituyente es impulsar acciones que liberen el potencial artístico de nuestra sociedad, que es, sin duda, parte esencial en la construcción de un país más equitativo y preparado para los desafíos que vienen.
