PAÍS
El comité formado por cinco parlamentarios y parlamentarias aseguró que en el debate legislativo insistirá en que los trabajadores formales deben ser apoyados por el Fondo Solidario de Cesantía. Además cuestionaron el bajo gasto fiscal comprometido por Hacienda en relación a otros países OCDE.
Los cinco parlamentarios y parlamentarias que forman el Comité de Senadores de la Democracia Cristiana se refirieron en términos críticos al plan económico que el gobierno presentó el jueves para enfrentar la emergencia derivada de la pandemia por el Covid-19.
En una minuta escrita, los senadores Francisco Huenchumilla, Yasna Provoste, Carolina Goic, Jorge Pizarro y Ximena Rincón, concordaron al afirmar que las medidas comunicadas por el Ministro de Hacienda, Ignacio Briones, representan un plan «débil» y «desequilibrado» por cuanto no representa un gasto fiscal a la altura de la emergencia y además deja a los trabajadores a cargo de financiar la suspensión temporal de los empleos a través de sus fondos de cesantía.
«Claramente es un Plan desequilibrado ya que el esfuerzo fiscal para proteger a los trabajadores es débil – el mundo laboral sufrirá una caída importante de sus ingresos-, pero Ministro de Hacienda propone que en el Seguro de Desempleo se utilice primero los ahorros de los trabajadores que tienen en su cuenta individual y después los recursos fiscales empozados en el Fondo Solidario de Cesantía», consignan en el texto.
Específicamente, el comité de senadores cuestiona que en primera instancia los trabajadores con contrato formal, cuyo empleo esté suspendido, hagan uso de sus ahorros en el fondo de cesantía con una tasa similar a la que establece la ley para cuando son despedidos y luego entre en vigencia el apoyo fiscal, a través del Fondo Solidario de Cesantía.
«Lo solidario en esta crisis transitoria es que los ingresos de los trabajadores afectados por la suspensión temporal se financien primero, con el Fondo Solidario de Cesantía que tendrá una importante inyección fiscal de US$ 2.000 millones que debe gastarse ahora y no el 2021 como propone la DIPRES», afirmaron.
En la misma línea cuestionaron la baja cantidad de dinero ofrecida en forma de bono a los trabajadores informales, que según cifras del INE suman 2,7 millones de personas, lo que representa un tercio de la fuerza laboral. Para este segmento, Hacienda comprometió un bono de $55 mil.
Los senadores DC propusieron que «si se declaró estado de catástrofe por 90 días el bono de apoyo debe incrementarse sustantivamente y darse en los próximos 3 meses para los 2,7 millones de trabajadores informales, tal como se postergó el pago de impuestos a las empresas. Es un gasto fiscal abordable (app US$ 600 millones) y puede financiarse con mayor endeudamiento fiscal»
Precisamente en esta línea va otro de los frentes de crítica: el gasto fiscal demasiado bajo, a juicio de los senadores considerando lo hecho por otros países miembros de la OCDE. «Un Plan que no llega a un gasto efectivo del 4% del PIB es débil y es pequeño si se compara con lo que hacen otros países OCDEs que gastan 3 o 4 veces más –en relación al PIB- para ayudar de verdad a la población afectada económicamente y socialmente en la guerra contra el coronavirus», afirmaron
A juicio de los parlamentarios, Hacienda debe hacer un gasto mucho más significativo. «Esta es la hora de enfrentar la crisis protegiendo a los trabajadores y ayudando a las empresas con los ahorros fiscales acumulados por décadas. Sólo así se puede sortear la crisis y estar preparados para la etapa post crisis», enfatizaron,
Los senadores afirmaron que en los días que vienen van a hacer presentes estas críticas y nuevas propuestas para mejorar el plan actual del gobierno. «En el debate parlamentario insistiremos que los trabajadores deben ser apoyados con los recursos fiscales que se ahorraron estos años para un momento de crisis como este. Así también las empresas PYMES para que accedan a garantías para créditos que permitan sortear la crisis»
