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Crédito: Agencia Uno. A la derecha, Fiscal Roberto Garrido.
El fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido manifestó estar «conforme» con el resultado de la audiencia -la que luego de 6 horas dejó al comunero mapuche y líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Héctor Llaitul, en prisión preventiva- aunque posteriormente recalcó que «tenemos que seguir trabajando, es una más de las etapas para que funcione correctamente el sistema de justicia». Otro punto abordado por el fiscal Garrido es sobre la forma en que se acreditaría la participación de Llaitul en los delitos que se le imputan en los distintos hechos que describió la fiscalía: tres por Ley de Seguridad del Estado y otros por robo de madera, usurpación y atentado a la autoridad. Al respecto, aclaró que «no estamos persiguiendo la forma de pensar de nadie sino que acciones que están descritas en la ley como constitutivas de delito».
El fiscal regional de La Araucanía, Roberto Garrido, se refirió a la audiencia de imputación de cargos contra el líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), Héctor Llaitul, la que luego de 6 horas dejó al comunero mapuche en prisión preventiva, con un plazo de 30 días para la investigación.
Garrido se manifestó «conforme» con el resultado de la audiencia, aunque posteriormente recalcó que «tenemos que seguir trabajando, es una más de las etapas para que funcione correctamente el sistema de justicia».
En conversación con Tele13 Radio, agregó que «llevamos dos años en esta investigación y nos adherimos al plazo que planteó la propia defensa (de Llaitul); faltan sin duda diligencias que no se pudieron realizar antes por el sigilo con el que se estaban realizando estas diligencias, pero creo que tenemos la capacidad para poder llevarlas a cabo y cumplir con el plazo para presentar prontamente la acusación». Entre esas diligencias pendientes, por ejemplo, está requisar el teléfono de Llaitul.
Otro punto abordado por el fiscal Garrido es sobre la forma en que se acreditaría la participación de Llaitul en los delitos que se le imputan en los distintos hechos que describió la fiscalía: tres por Ley de Seguridad del Estado y otros por robo de madera, usurpación y atentado a la autoridad. Al respecto, aclaró que «no estamos persiguiendo la forma de pensar de nadie sino que acciones que están descritas en la ley como constitutivas de delito. Estas acciones consisten en incitar, promover la realización de determinadas acciones».
«Si comparamos los dichos del imputado y luego las acciones que se realizan, las pancartas, los lienzos que se encuentran en esos lugares, creemos que se puede establecer un nexo entre la incitación que realiza y la realización de esos atentados, y de esa manera, se satisface la exigencia de la ley», complementó.
En esa línea, el persecutor destacó la figura de liderazgo que ejerce Llaitul en el lugar: «no estamos hablando de cualquier persona (…) es un líder histórico, con una alta exposición mediática, que mantiene el discurso, que lo reitera y es bastante explícito en su lenguaje beligerante y después sus expresiones se ven traducidas en acciones concretas».
