Ambos equipos monopolizaron la celebración en la undécima fecha, que registró la vuelta a Cobresal al liderato aprovechando el tropiezo de Católica y la defección estrepitosa de Colo Colo. Ah, también ganó la U.
Durante las dos semanas que impone el receso, la capital del fútbol chileno será el árido campamento de El Salvador, donde Cobresal clavó su bandera de flamante líder del Clausura gracias a una victoria epopéyica sobre la Universidad de Concepción.
El equipo minero revirtió su suerte en los últimos 10 minutos con un temple notable y su capacidad futbolística reconocida, luego de quedar con diez jugadores cuando ya estaba en desventaja por la anotación de Aguirre.
Primero fue Rodrigo Ureña quien obtuvo el empate transitorio, anotando encima del arco, y a los 93 minutos, el árbitro Polic sancionó una mano clara como falta penal que Víctor Hugo Sarabia ejecutó con certeza y jerarquía.
Con 24 puntos, Cobresal encarna un cúmulo de virtudes propias, considerando que la planilla mensual de Colo Colo y la U quintuplican el presupuesto naranja. Y junto a Unión La Calera, otro cuadro tan modesto como atrevido, conforman aquella “armada” provinciana en la eterna lucha por la gloria del torneo.
En tanto, el triunfo dominical de la U sobre Palestino, en un duelo de equipos coperos que caminan por la cornisa en sus grupos de la Libertadores, se convirtió apenas en un análgesico para los pesares del equipo universitario en una etapa de profunda revisión interna.
Un gol de Guzmán Pereira y dos de Gustavo Canales le dieron una victoria contundente y legítimo que le otorga más tranquilidad que alegría para abordar lo que resta de campeonato. Y luego de empatar con Montevideo Wanderers en la Copa, la caída tricolor le instala subcolista y le reubica en un plano más moderado respecto del tropicalismo con que la prensa analizó el “boom” de la Cenicienta que cumplía su sueño dorado de la Copa, y del técnico desconocido –Pablo Guede- que saltó a la vitrina con el rótulo insólito del “Pep Guardiola argentino”.
Además de la frustrada inclusión de Johnny Herrera en la nómina casera, el partido brindó un cierre inusual con la imagen del árbitro Jorge Osorio –en una actitud valorable para evitar un incidente- abrazando al palestinista Osorio e impidiendo que fuera a encarar a Martínez, luego de que el volante azul “canchereara” con la pelota casi en el último minuto.
Con todo, más allá de lo sucedido en El Salvador, la undécima fecha ofreció dos partidos de fulgores especiales en la capital. El viernes en La Florida, Audax Italiano y Universidad Católica brindaron un encuentro muy intenso y atrayente, con un reparto de puntos que castigó la incapacidad de la UC para aprovechar la superioridad numérica tras la expulsión de Diego Gonzalez y, en especial, la inmejorable opción de quedar como líder.
Una anotación de Pol y otra de Gutiérrez enmarcaron la igualdad 1-1, en un resultado insuficiente para ambos: a los verdes no los libra definitivamente del promedio de descenso y a los cruzados no les basta para atrapar el liderazgo que buscaban.
Tan espectacular como resonante, la goleada de Unión La Calera sobre Colo Colo en el Monumental se transformó en el gran golpe de la jornada. No sólo por un triunfo de rasgo épico que los rojos no obtenían desde 1967, sino además por la superioridad que mostraron en el juego.
A comienzos de semana la prensa mostró al paraguayo Justo Villar y al goleador Esteban Paredes jugando golf en un día que normalmente debía de entrenamiento futbolístico y ese hecho puntual -pintoresco, al menos- llevó a varios hinchas disconformes a comentar en el Monumental que “hay que volver a poner la cabeza en lo que corresponde y esto nos servirá como un baño de humildad”.
Lección aprendida o no, La Calera desnudó todos los problemas de funcionamiento de los albos. También merecen revisarse los elogios a los rendimientos individuales que mostraron puntales como Barroso, Beasejour y Valdés, por ejemplo. Dos golazos de Tévez, otro de Jean Paul Pineda y el último de Barroso en contra, cifraron el triunfazo calerano que deja al equipo del Fantasma Pereira en el umbral de la punta, considerando el partido aún pendiente.
Y a Colo Colo le hereda enseñanzas evidentes para afianzar su postulación al título con los pies puestos en la tierra: la torpe expulsión de Fierro se suma a errores similares; la lesión de Humberto Suazo demuestra que no se encuentra en su mejor condición física, y le derrota en sí obliga al técnico Tapia a “remecer el árbol”, parafraseando el consejo de Lasarte cuando es necesario tomar medidas y hacer cambios.
La fecha, también, registró la victoria a domicilio de Antofagasta sobre un condenado y resignado Barnechea -ya con la mente en la Primera B-, así como la incapacidad de Unión Española para ganar en Santa Laura, donde ahora igualó 1-1 con Ñublense.
En el Carlos Dittborn de Arica, a San Marcos le volvieron a empatar en los descuentos y el 3-3 con Wanderers enseña cierta desconcentración de un elenco que parece “irse” al vestuario antes del pitazo. Igual de vibrante fue el triunfo de Huachipato sobre O’Higgins en Talcahuano, con un 3-2 que los acereros aseguraron sobre el final gracias al instinto goleador del retornado Héctor Mancilla.
En un receso motivado por los amistosos de la Selección, Pablo Calandria y Esteban Paredes comandarán al menos por 15 días la tabla de goleadores con 8 tantos, en una demostración de que los “maestros” -al fin- siempre son más expertos después de los 30 años…