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El comandante en jefe del Ejército de Colombia, Nicacio de Jesús Martínez Espinel, dirigió una brigada acusada de realizar, al menos, 283 supuestas ejecuciones extrajudiciales en los departamentos de La Guajira y del Cesar.
Una impactante denuncia sacude a Colombia. De acuerdo a documentos revelados por el diario español El País, el comandante en jefe del Ejército de Colombia, Nicacio de Jesús Martínez Espinel, dirigió una brigada acusada de realizar, al menos, 283 supuestas ejecuciones extrajudiciales en los departamentos de La Guajira y del Cesar, por lo que es denunciado por el Ministerio Público del país latinoamericano.
En 23 de esos casos se produjeron entre octubre de 2004 y enero de 2006, cuando el general era segundo comandante y jefe del estado mayor del grupo.
En el documento se hace referencia a a los «falsos positivos», es decir, los asesinatos de civiles perpetrados por militares y presentados luego como guerrilleros de las FARC. En ellos se describen episodios ya juzgados que ponen bajo la lupa las acciones de esa brigada, en la que Martínez asegura se dedicó a tareas administrativas.
La Décima Brigada Blindada que dirigió Martínez fue señalada en un informe del exfiscal general Eduardo Montealegre como «uno de los primeros lugares en el ránking de presuntas ejecuciones extrajudiciales».
Los casos reportados en 2005, durante la presidencia de Álvaro Uribe, involucran al menos a dos batallones en asesinatos al margen de la ley, la acusación de una masacre indígena y un episodio de violencia sexual.
Mientras esto es investigado, este miércoles el Senado colombiano tiene previsto votar el respaldo o el rechazo del ascenso de Martínez, tras haber sido nombrado al frente del Ejército el pasado diciembre por el presidente Iván Duque.
