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Crédito: @Armada_Chile
Los indígenas de la zona afectada le pidieron a la autoridad marítima que inicie una «investigación de este evento y la persecución de las responsabilidades a las que dé lugar, en su más alto grado y extensión».
La comunidad indígena Kawésqar emplazó a la Armada a que actúe en la Isla Guarello, tras la emergencia ambiental producida por el derrame de 40 mil litros de petróleo en las operaciones que la Compañía de Aceros del Pacífico (CAP) realiza en la zona.
En ese sentido, pidieron, a través de una declaración pública, que «la Autoridad Marítima contenga los efectos de este evento, el cual amenaza bases fundamentales de nuestra cultura, de nuestro territorio y de nuestros recursos ancestrales». Para eso, piden una «investigación de este evento y la persecución de las responsabilidades a las que dé lugar, en su más alto grado y extensión».
«El derrame de hidrocarburos en el área nos impacta directamente. Afecta nuestros derechos bioculturales en el territorio y amenaza la sobrevivencia de bancos naturales, colonias de recursos y áreas de tránsito de mamíferos y aves marinas, bases de nuestra cultura y medios de vida ancestrales», dicen.
«El derrame de petróleo en Isla Guarello muestra la necesidad de que se dispongan instrumentos específicos para la realización de actividades que contienen riesgos intrínsecos en áreas del Archipiélago Patagónico. Hemos reclamado que se arbitren esos instrumentos desde hace años, sin que los Gobiernos de todo signo, hayan sido capaces de disponer de su voluntad política para ello. La consecuencia es este pernicioso evento, cuyas consecuencias son aún impredecibles», agregan.
La comunidad Kawésqar volvió a reiterar que los principales afectados por este derrame son los «canoeros, para quien el mar y sus recursos son constitutivos de su cultura. En él se encuentran pinturas rupestres de nuestros antepasados, de alta significación cultural y arqueológica».
También explican que en la Isla Guarello existen «sitios-tabú, cuya transgresión se revela en este tipo de acontecimientos. Muchos de esos sitios protegen recursos marinos ancestrales que hemos resguardado por miles de años».
«La zona, además, es tránsito de grandes cetáceos y lugar de colonias de lobos marinos y de aves marinas, con los cuales nuestra comunidad tiene un estrecho vínculo biocultural», puntualizan.
