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Crédito: Archivo | Agencia UNO
«Un motivo de especial y gran preocupación son las tomas de municipios de la región, que además afectan el acceso a servicios esenciales para el goce efectivo de derechos de las personas», señaló el organismo a través de un comunicado.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) manifestó su preocupación ante los hechos de violencia ocurridos en la región de La Araucanía y llamaron «a todos los actores a propiciar una cultura de diálogo y de respeto por los derechos humanos».
«Un motivo de especial y gran preocupación son las tomas de municipios de la región, que además afectan el acceso a servicios esenciales para el goce efectivo de derechos de las personas. Es muy grave el que grupos de civiles decidan ejecutar acciones de desalojo de dichas tomas, que sólo competen a las autoridades competentes, y que éstas no actúen oportunamente. Por lo mismo, hacemos un llamado a que se investiguen estas situaciones y se identifique a las personas responsables», señaló el organismo a través de un comunicado.
«Alertamos sobre situaciones cada vez más recurrentes que promueven el enfrentamiento y el odio racial. Todos los actores sociales, y en particular las autoridades, deben condenar enérgicamente dichas situaciones, pues no son aceptables en una sociedad que debe construirse sobre la base de la convivencia intercultural», agrega la declaración.
El INDH insistió en que el Estado de Chile «tiene el deber de tomar a través de sus distintos organismos medidas inmediatas y positivas destinadas a eliminar toda incitación a la discriminación racial o actos de tal discriminación».
«El Instituto Nacional de Derechos Humanos ha estado realizando todas las gestiones que contribuyan a generar un clima de diálogo, de entendimiento y de búsqueda de canales institucionales para resolver las diversas situaciones que aquejan a la zona, incluyendo la huelga de hambre de presos de origen mapuche, siempre de una manera acorde con el respeto a los derechos humanos».
Finalmente, exigieron respeto a los derechos humanos de todas las personas que viven en la región «incluyendo las pertenecientes a los pueblos indígenas». También llamaron «a todos los actores a retomar y mantener el diálogo y actuar con apego a una cultura del respeto y la paz, llamado que reiteramos enfáticamente en estos momentos».
