La reunión, concretada de forma telemática, fue criticada por sectores debido a los gestos expresados por ambas autoridades, con imágenes que mostraban sonrisas en Bachelet y Maduro. “Se conversó sobre el avance en la cooperación con su Oficina, el impacto negativo de las sanciones (internacionales) y nuestra política para controlar el Covid-19”, detalló el canciller de Venezuela, Jorge Arreaza en su cuenta de Twitter.
El jefe de bancada de los diputados UDI, Juan Antonio Coloma, le envió una carta a la Alta Comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, para expresar su molestia tras la reunión que sostuvo la ex presidenta con el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
La reunión, concretada de forma telemática, fue criticada por sectores debido a los gestos expresados por ambas autoridades, con imágenes que mostraban sonrisas en Bachelet y Maduro. “Se conversó sobre el avance en la cooperación con su Oficina, el impacto negativo de las sanciones (internacionales) y nuestra política para controlar el Covid-19”, detalló el canciller de Venezuela, Jorge Arreaza en su cuenta de Twitter.
Sostuve una excelente videoconferencia con la Alta Comisionada de la ONU para los DDHH, @mbachelet. Conversamos sobre los efectos negativos de las sanciones contra Venezuela, también ampliamos elementos en materia de nuestra política de atención a la Pandemia del Covid-19. pic.twitter.com/3EiegswS2E
— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) March 3, 2021
Esta imagen le generó molestia a Coloma, quien en la misiva, dice que «el pueblo venezolano lleva ya largos años sumidos en el dolor y la miseria. El atropello diario a sus derechos fundamentales, las detenciones ilegales, los presos políticos, la aplicación de métodos de tortura -que su oficina también contrastó en alguna oportunidad-, los universitarios reprimidos, dirigentes sociales perseguidos o muertos, no hacen más que reafirmarnos que nos encontramos ante una dictadura que ha cometido delitos de lesa humanidad».
«El desangre del pueblo venezolano y el terror diario en el que viven, ha obligado a cientos de miles de venezolanos a dejar su país y huir en búsqueda de mejores condiciones. No tienen esperanzas de que exista una pronta solución a la crisis humanitaria por la que atraviesan, razón por la cual deben buscar en el continente, nuevas oportunidades y sueños. Tanto es así, que ya van más de cinco millones de venezolanos fuera de su país, causando una de las mayores crisis migratorias de América del Sur», añade.
Es por esto que Coloma critica a Bachelet, ya que a su juicio «no guarda el respeto mínimo al expresar una sonrisa amiga, una sonrisa cómplice, que denota admiración ante un siniestro dictador que se ha visto envuelto en violaciones sistemáticas a los derechos humanos de su pueblo, y delitos de lesa humanidad. Creemos que su actitud no sólo es una burla para todas las víctimas del pueblo venezolano, sino también un insulto, que desconoce el dolor y sufrimiento de un pueblo entero».
«Creemos que este nivel de complicidad y comodidad ante un dictador no es permisible, y menos aún en su autoridad. Tal como lo ha sostenido Ali Daniels, director de la ONG Acceso a la Justicia, la ética tiene que venir acompañada de una estética», finaliza, pidiendo, a nombre de la bancada UDI, una disculpa de Bachelet.