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Crédito: Agencia Uno
«Tengo discrepancias insalvables sobre varios contenidos de esta propuesta, los que considero comprometen la paz, el desarrollo y la prosperidad de nuestro país», señaló el expresidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle en una declaración.
El expresidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle anunció este viernes, a través de un comunicado, que votará Rechazo en el plebiscito de salida de la propuesta de nueva Constitución, que se realizará el 4 de septiembre.
En la misiva, si bien el exmandatario destacó materias de la propuesta constitucional (como el Estado Social y Democrático de derechos, la ampliación de los derechos sociales, el reconocimiento de los pueblos originarios y la multiculturalidad, los derechos de las minorías sexuales, entre otros), manifestó «discrepancias insalvables» con el texto.
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«Tengo discrepancias insalvables sobre varios contenidos de esta propuesta, los que considero comprometen la paz, el desarrollo y la prosperidad de nuestro país», señaló Frei.
«Exhorto a todos quienes comparten esta posición (el Rechazo) a comprometerse para cumplir con los objetivos del Acuerdo por la Paz y la Nueva Constitución de noviembre de 2019, de contar con una Nueva Carta Fundamental», instó el exsenador.
«Rechazo con un llamado a identificar aquellos aspectos de la propuesta de la Convención que deben ser parte de un acuerdo amplio sobre una reforma constitucional, que los incorpore en el menor plazo posible», expresó.
Sobre las discrepancia, manifestó críticas contra el sistema político acordado por el órgano constituyente.
«El sistema político propuesto no establece un adecuado equilibrio y división de poderes, crea una Cámara omnipotente y está expuesto a que una mayoría ocasional que controle la presidencia y la Cámara política, pueda avanzar hacia un régimen dictatorial de los que en el mundo están siendo frecuentes», sostuvo.
También cuestionó al Consejo de Justicia, sucesor de la Corte Suprema. «Juzgo inadecuada su composición fuertemente política y su enorme cúmulo de facultades, que van desde el nombramiento, pasando por la potestad disciplinaria, la gestión administrativa, la revisión de sus actuaciones, su traslado y remoción», dijo.
A su vez, criticó la regionalización propuesta por la Convención. «La forma concreta de su propuesta hace que se frustre por una superposición de autonomías, de legislaciones de distinto origen, una plétora de asambleas y, además, comete el error de no haber puesto el acento en el fortalecimiento de los alcaldes y gobernadores», expuso Frei.
Por último, expresó discrepancias con la plurinacionalidad. «En la forma que está propuesta puede ser una amenaza al Estado unitario y a la igualdad de derechos de los habitantes del país. El poder que se entrega a los pueblos originarios para vetar iniciativas administrativas o legislativas, constituye un privilegio que no tiene el resto de la ciudadanía», indicó.
