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Crédito: Agencia Uno
El excomandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, arribó al despacho de la ministra en visita de la Corte Marcial, Romy Rutherford, para declarar en calidad de inculpado por delito de malversación de caudales públicos.
El excomandante en jefe del Ejército, Juan Emilio Cheyre, arribó hasta la oficina de la ministra en visita de la Corte Marcial, Romy Rutherford, para declarar en calidad de inculpado por el delito de malversación de caudales públicos.
Cabe destacar que el Consejo de Defensa del Estado (CDE) solicitó a la ministra Rutherford que amplíe el auto de procesamiento dictado contra los excomandantes en jefe de las Fuerzas Armadas.
Se trata de Juan Miguel Fuente-Alba y Óscar Izurieta Ferrer, también por el delito de malversación de caudales públicos en la arista F-A del fraude al interior de la institución castrense denominado «Milicogate».
Si bien ya están procesados por malversación de caudales públicos, ahora el organismo toma en cuenta que, en virtud de los antecedentes que maneja, puede atribuirle la participación de delitos de similares características.
«En su calidad de excomandantes en jefe y en concierto con los comandantes en jefe que los sucedieron, sustrajeron parte de los caudales correspondientes a gastos reservados y los emplearon en provecho propios», sostiene el documento del CDE.
El presidente del órgano, Juan Antonio Peribonio, afirmó que los argumentos dan cuenta de que existen elementos probatorios múltiples, precisos, graves y concordantes. En tanto, el abogado Cristián Cruz valoró el trabajo de la ministra Rutherford.
«La señora ministra ha sido un oasis en una justicia militar, siempre dispuesta a tapar, a no avanzar en Justicia. Y eso es lo que la ha distinguido», manifestó.
«Debe haber una limpieza en los Altos Mandos castrenses. Han tenido las manos manchadas con sangre y los bolsillos con dinero que es de todos los chilenos», sentenció.
