Movilidad
2019 dejó una feroz competencia en un tipo de autos algo olvidado, pero que sigue siendo clave: los sedanes, donde en el segmento lujo conviven ejemplares tan completos como la última evolución de este venerable tres cuerpos japonés.
Las marcas japonesas tienen entre sí, bastante más en común que si simple origen. Así, por ejemplo podemos encontrar que en su desarrollo, desde su llegada a los mercados mundiales, hasta su consolidación la gran mayoría tuvo en su historia un modelo clave, que significó un cambio de percepción de sus clientes y un salto evolutivo. En el caso de Honda uno de estos modelo es el Accord.
Nacido como un “acuerdo” (Accord), entre la sociedad, la compañía y los automóviles, nace encarnando valores que persisten en esta última encarnación: deportividad, confort y calidad, en un formato atractivo y práctico. No en vano en todas sus generaciones ha sido el modelo más nominado (en 22 ocasiones) y premiado entre los “Top Ten” de la revista estadounidense Car and Driver, una de las más prestigiosas del sector.
Su última generación contínua con la premisa original, pero proyectada al nuevo siglo y consumidor en base a una batería tecnológica con lo último en tendencia en equipamiento, además una mecánica que le permite -siendo un señorial sedán de gama alta- proveer de una deportividad que solo una compañía como Honda (que sigue en la Fórmula Uno como proveedor de motores), puede brindar.
El nuevo Honda Accord es un sedán grande, que en virtud del posicionamiento de la marca en Chile y su alto equipamiento en seguridad, asistencias y confort califica para el competitivo segmento de sedanes de gama alta, con una experiencia muy cercana al nicho premium.
Sus dimensiones grandes, hacen imposible no relacionarlo con los grandes sedanes de representación, pensados para el mundo ejecutivo, empresarial y de alto personeros. Pero además agrega un toque más lúdico y atrevido, con un frontal bastante agresivo, algo robótico y muy moderno, que lo enlaza con la genética de la marca, muy futurista. Su caída fastback en la parte trasera, complementa su estilo deportivo, pero también se ve largo, en un guiño a su funcionalidad familiar; uno de los valores del versátil estilo sedán.
2018 Honda Accord Touring 2.0T
En el interior, la carga tecnológica, el estilo elegante y minimalista japonés se fusiona para entregar una experiencia futurista, con toques propios y particulares de la marca, como el selector de su transmisión de 10 velocidades, mediante teclas en la consola central, complementado con paddle shifts al volante. Esta avanzada caja de cambios es la encargada de controlar los 247 caballos de fuerza y 270 Nm de torque que emanan de su motor de 2.0 litros, turbocargado, el corazón de este modelo capaz de ofrecer varias experiencias distintas.
Así, en el mismo Honda Accord se puede disfrutar de un viaje en extremo confortable, gracias a su espacio interior, su señorial andar, sus terminaciones y materiales, subrayado por su equipamiento de punta en tecnología de infoentretenimiento; pero también puede sacar su bestia interior, con un andar muy deportivo que exprime al máximo el torque de este modelo para lograr un impresionante desempeño en aceleración y recuperaciones, en modo sport.
El nuevo paquete de tecnologías Honda Sensing ofrece avances en seguridad y asistencia para el conductor como sistema de frenado mitigación de colisión (CMBS), sistema mitigación salida de carril (RDM), advertencia de colisión frontal (FCW), advertencia salida de carril (LDW), asistencia mantención de carril (LKAS) y control crucero adaptable, que lo ponen bastante cerca del futuro de la conducción semiautónoma.
Experiencia premium, auto bien plantado, versátil y competente tanto como auto de representación, como opción familiar, con toques deportivos bastante emocionantes, el nuevo Honda Accord siempre debe estar en la terna de sedanes a probar en el segmento de alta gama.
