El Gobierno de Cristina Fernández impuso a finales de 2011 restricciones para el acceso al mercado formal de divisas que ha hecho florecer la plaza cambiaria ilegal, en el que el dólar cotiza muy por encima del valor oficial, y Macri ha prometido acabar con el denominado «cepo» cambiario.
El futuro ministro de Hacienda argentino, Alfonso Prat-Gay, dijo ayer que las restricciones cambiarias serán levantadas «rápido» y de forma «prolija», tal como lo prometió el electo presidente Mauricio Macri, aunque dijo que deben estar dadas ciertas «condiciones» para poner fin al «cepo».
En diversas entrevistas publicadas por la prensa local, Prat-Gay, quien asumirá al frente del Ministerio de Hacienda el próximo jueves, dijo que «unificar el mercado de cambios es la primera señal para que la economía se empiece a normalizar».
El Gobierno de Cristina Fernández impuso a finales de 2011 restricciones para el acceso al mercado formal de divisas que ha hecho florecer la plaza cambiaria ilegal, en el que el dólar cotiza muy por encima del valor oficial, y Macri ha prometido acabar con el denominado «cepo» cambiario.
«Vamos a cumplir con esa promesa lo más rápido y lo más prolijo que se pueda. Si podemos hacerlo el 14 (de diciembre), lo haremos el 14, y si no, cuando veamos que estén dadas las condiciones», dijo Prat-Gay, expresidente del Banco Central.
El economista, experto en política monetaria, dijo que entre estas condiciones está el tener nuevas autoridades en el Banco Central.
El actual titular de la autoridad monetaria, Alejandro Vanoli, designado hace un año por la mandataria Cristina Fernández por un mandato de cuatro años, mantiene la incógnita sobre si renunciará o no, una vez que Macri asuma la Presidencia el jueves.
«Levantar el cepo con las autoridades actuales sería bastante difícil de implementar, porque no hay una coherencia entre lo que piensa el gobierno elegido y lo que han hecho hasta ahora las autoridades del Central», sostuvo Prat-Gay.
La otra gran condición que el futuro ministro pone para levantar el cepo asegurarse de que haya «una buena oferta de dólares para estar tranquilos».
Las reservas del Banco Central cerraron el viernes en 25.011 millones de dólares, su nivel más bajo desde julio de 2006.
Prat-Gay apuesta a reforzar las reservas mediante el ingreso de divisas de la liquidación de la cosecha de granos y a través de «otra fuente de aporte» que no quiso revelar hasta tanto se concrete.
Consultado sobre el efecto inflacionario que podría derivarse de la depreciación del peso con la liberación del cepo cambiario, aseguró que «no tiene por qué haber un fuerte traslado a precios de una devaluación».
Afirmó que se establecerán «metas de inflación decrecientes» y que a mediados de enero buscarán un acuerdo «amplio» entre sindicatos y empresas de cara a las negociaciones salariales.
Reiteró que los impuestos a las exportaciones de granos serán eliminados y que los subsidios serán orientados a la población que realmente los necesita.
Por otra parte, dijo que el Presupuesto 2016 aprobado por el Parlamento a propuesta del Gobierno saliente es «inútil» porque «esta basado en supuestos que no se van a cumplir» y señaló que «en algún momento del año que viene vamos a tener que pasar un nuevo presupuesto».
Respecto a la actividad económica, dijo que la nueva gestión apunta «a que en la segunda mitad del año que viene la economía ya esté creciendo fuertemente».
Sobre el conflicto con los fondos especulativos que litigan en Nueva York contra Argentina por bonos en mora desde 2001, Prat-Gay indicó que «la semana que viene el secretario de Finanzas va a tener una reunión con el mediador» en el caso, Daniel Pollack.
«La instrucción de Macri es iniciar una discusión en el juzgado lo antes posible. Ahora, dialogar no significa que no vamos a ser muy duros en el momento de la negociación», señaló. EFE
