MERCADOS
Tras las cuentas alegres que saca el gobierno tras el buen pasar de la economía chilena, luego que ayer se conociera la expansión de 5,9% del Imacec a abril, logrando su mejor mayor ritmo en casi seis años. Y la cuenta pública de Sebastián Piñera el pasado 1 de junio. Esta mañana el ministro Larraín anunció el nuevo compromiso fiscal del gobierno: reducir de 2% a 1,2% del PIB el déficit estructural a 2022.
Esta mañana el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, junto al director de Presupuestos, Rodrigo Cerda, anunciaron un nuevo compromiso fiscal de parte del Gobierno.
Reducir de 2% a 1,2% del PIB el déficit estructural de aquí a 2022 es el objetivo que el titular de la cartera planteó para «contribuir al crecimiento económico», pero partiendo de la base de un «déficit fiscal mayor» heredado por la administración anterior.
En el anuncio Larraín hizo hincapié en que la situación actual era más compleja a lo esperado, y en definitiva las presiones de gasto limitaron el espacio de acción.
Durante el año pasado el déficit fiscal estructural fue del 2% del PIB. «El compromiso fiscal implica que no se puede gastar todo lo que se quiera», aseguró Larraín ante la prensa en Teatinos 120.
Cabe destacar que, dentro del mensaje presidencial del pasado 1 de junio, de acuerdo a información publicada por el Banco Central, se dio a conocer que entre los años 2014 y 2017 el ritmo de crecimiento promedio de la economía chilena alcanzó un 1,7 por ciento anual, menos de la mitad del crecimiento promedio alcanzado entre 1984 y 2013, que fue de 5,4 por ciento al año.
«En efecto, si en la década de los noventa el PIB potencial crecía en alrededor de 6,6 por ciento real anual, de acuerdo a la información publicada por la Dirección de Presupuestos (Dipres), en la siguiente década su ritmo descendió al 4,5 por ciento y actualmente se cifra en 2,6 por ciento», detalla la publicación sobre la situación de la Administración del Estado.
