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No está claro si la compañía pedirá los buenos oficios, o mediación obligatoria, de la Inspección del Trabajo. Pero asegura está revisando los planes de contingencia para minimizar los impactos de una eventual paralización. «Todos perdemos en una huelga, esa fue la experiencia que vivimos en 2017 y creo que nadie quiere repetirla”, señaló el vicepresidente de asuntos coporativos de la compañía.
«Los socios de nuestra organización sindical han hablado nuevamente, en una muestra de consecuencia sindical han dicho fuerte y claro que no aceptarán afectar sus beneficios y condiciones de trabajo a cambio de un bono de término», así señaló el Sindicato N°1 de Minera Escondida su rechazo a la última oferta de la compañía para evitar una paralización de las faenas en el yacimiento.
A través de un comunicado los trabajadores señalan que la huelga es inminente. Sin embargo reiteraron su disposición para alcanzar un acuerdo que evite una «dañina huelga». «Exhortamos a la Empresa a modificar su postura y hacerse cargo de los temas que hemos reclamado legítimamente», sentencian.
El Sindicato tomó la decisión de no pedir los buenos oficios, o mediación obligatoria de la Inspección del Trabajo. En el caso que no veamos un cambio de postura hasta el lunes 6 de agosto próximo, concluiremos que no tiene sentido abrir un espacio meramente dilatorio de mediación obligatoria», señalan.
La Compañía, tras ser notificada del rechazo a su última oferta, la que señalan como «el mejor esfuerzo de la empresa», recalcó el hecho de que con un 84% de los votos, los trabajadores aprobaron ir a huelga. destacando que anteriormente se superaba el 95%. “Valoramos a los 370 trabajadores que votaron a favor de la propuesta”.
Además, se refirieron a las implicancias del pronunciamiento emitido el pasado martes 31 de julio por la Dirección del Trabajo, que señaló explícitamente que el contrato de quienes opten por el reintegro a los 30 días de huelga tendrá una duración de 36 meses, no pudiendo negociar antes del vencimiento de ese plazo.«Confiamos en que los trabajadores puedan reflexionar respecto de todos los aspectos incluidos en esta oferta».
Patricio Vilaplana, vicepresidente de asuntos corporativos de Escondida, señaló que “queremos que los trabajadores tengan claro que la última oferta se mantiene vigente hasta el día 5 de agosto, posterior a esa fecha se perderán los beneficios”.
Dado que el escenario de huelga es posible, la empresa está revisando los planes de contingencia para minimizar sus impactos y resguardar la seguridad de las personas y las instalaciones. Finalmente, Vilaplana señaló que “una huelga en Escondida tendría efectos muy negativos para nuestros trabajadores y sus familias, la empresa, la región y el país.
Todos perdemos en una huelga, esa fue la experiencia que vivimos en 2017 y creo que nadie quiere repetirla”.
