El presidente de Francia François Hollande dijo que los líderes europeos están estudiando la forma de que el fondo permanente de rescate de Europa pueda comprar deuda de los países que, como Italia, han tomado medidas de saneamiento fiscal.
“Italia planteó una idea que merecía ser analizada”, declaró Hollande a los periodistas después de una cumbre de mandatarios del Grupo de los 20 en Los Cabos, México. La propuesta es que “los países virtuosos como Italia”, que han mejorado sus finanzas públicas, “puedan recibir financiamiento para su deuda” a mejores tasas que los países que no realizaron los mismos esfuerzos.
“Estamos viendo la manera y los medios” para utilizar el Mecanismo de Estabilidad Europea, el fondo de rescate permanente de la región euro de 17 países, “en estas condiciones”, agregó Hollande. Alemania dijo que no se discutió en México ningún plan específico para que los fondos de rescate de Europa compraran bonos de gobiernos de la zona euro.
Los líderes del G-20 mantuvieron su segunda reunión cumbre consecutiva en la que el tema predominante fue la crisis soberana de la zona euro, en tanto los costos del endeudamiento para España traspasaron el nivel del 7 por ciento que obligó a rescates soberanos para Grecia, Irlanda y Portugal.
Hollande señaló que espera analizar la propuesta de compra de bonos con sus pares de Alemania, España e Italia cuando se reúnan en Roma el 22 de junio. Todavía no se ha tomado una decisión sobre la propuesta, aclaró.
El fondo de rescate temporal y el fondo permanente, que entrará en vigor en julio, tienen la opción de comprar bonos soberanos en el mercado secundario como una de varias medidas, explicó un funcionario alemán que pidió reserva de su nombre porque las conversaciones del G-20 son privadas.
Todos los instrumentos están ligados a condiciones y ninguna iniciativa de ese tipo se analizó en la cumbre de Los Cabos, añadió el funcionario.
La reunión de Roma es para trabajar en la preparación de una cumbre de la Unión Europea que se celebrará en Bruselas el 28 y 29 de junio y en la cual los mandatarios estudiarán el camino que debe seguirse para una mayor integración financiera e incluso las propuestas de una colaboración más estrecha en materia bancaria.
“Tengo fe en este proceso porque, en lo que hace a crecimiento, a una unión bancaria y a unir la solidaridad con la responsabilidad presupuestaria, tenemos la posibilidad de un acuerdo” en Bruselas, dijo Hollande.
