El presidente ejecutivo de YPF ; Miguel Galuccio, dijo este jueves que la empresa necesita inversiones por 37.200 millones de dólares en el período 2013-2017, de los que prevé financiar con recursos propios unos 32.600 millones.
YPF busca aumentar la producción de petróleo y gas en un 32 por ciento y la de nafta y diésel en un 37 por ciento. Su meta de endeudamiento en relación al EBITDA (ganancias antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones) no puede superar un ratio de 1,5 veces, según el plan presentado por su presidente.
La empresa, controlada por el Estado tras su reciente expropiación de un 51 por ciento del capital accionario a la española Repsol, distribuirá un 5 por ciento de sus beneficios como dividendos, informó en la presentación de un plan de gestión para los próximos años.
De no conseguir un socio estratégico para explotar los gigantescos depósitos argentinos de hidrocarburos no convencionales, YPF reduciría su plan de inversiones a 24.700 millones de dólares, de los cuales sólo un 6 por ciento serían afrontados con financiamiento.
La política de dividendos representa una drástica disminución respecto a la llevada a cabo por Repsol, que repartía hasta el 90 por ciento de las ganancias de la compañía, una de las tasas más altas de la industria.
Galuccio dijo en la presentación del plan que las finanzas de la mayor compañía argentina están sólidas. «Mucho se ha dicho sobre la estabilidad financiera de la compañía, con lo cual hoy quisiera pasar un mensaje tanto acá en Argentina como en los mercados extranjeros: la estabilidad financiera de YPF está asegurada», indicó.
Entidades que financian a la compañía, que se apresta a lanzar una emisión de deuda local, continúan trabajando con YPF «como siempre», aseguró Galuccio. La empresa está planeando también una gira de presentación para dar a conocer su plan estratégico a entidades financieras de Estados Unidos y Europa.
